En la Caracas, las iglesias más visitadas son: la Basílica de Santa Teresa, la Iglesia de San Francisco, la Catedral de Santa Ana, la Basílica Santa Capilla, las Mercedes, Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria
Como parte de las tradiciones de la Semana Santa, los habitantes de Caracas recorrieron los siete templos, como una de las actividades más arraigadas en la fe católica.
En este sentido, las iglesias más visitadas por los feligreses, en la capital fueron: la Basílica de Santa Teresa, la Iglesia de San Francisco, la Catedral de Santa Ana, la Basílica Santa Capilla, las Mercedes, Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria.
Visitar las siete iglesias es una tradición iniciada en Roma por San Felipe Neri y que se ha propagado por el mundo entero.
Las actividad tiene como finalidad agradecer a Jesucristo por los dones de la Eucaristía y del sacerdocio que instituyó aquella noche de la última cena y su camino hacia el Huerto de Getsemaní.
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Cómo inicia
El recorrido por los siete templos inicia en la noche del Jueves Santo y finaliza en la madrugada del Viernes Santo, según la ciudad o lugar de peregrinación.
Cada una de las visitas a los templos simbolizan el acompañamiento de los devotos a Jesús de Nazaret por cada uno de los recorridos que tuvo que hacer, una vez fue apresado por las autoridades de Jerusalén.
Según la Biblia, Jesús llegó en principio al huerto de Getsemaní, lugar donde constató la ingratitud y el sufrimiento de la humanidad. El pasaje bíblico señala que fue allí donde Judas Iscariote entregaría a Cristo por 30 monedas de plata y a su vez se resaltaría uno de los episodios iniciales de la pasión del salvador con el beso de Judas.
Jesús llegó en principio al huerto de Getsemaní, lugar donde constató la ingratitud y el sufrimiento de la humanidad.
Sin embargo, se señala que el primer recorrido de Jesús, antes de su captura en Getsemaní, inicia con su arribo al Cenáculo, lugar donde celebraría la Última Cena con sus discípulos.
Allí también se revelaría el último pasaje que tendría que recorrer Cristo antes de su muerte en la cruz y su posterior resurrección al tercer día.
El segundo templo personifica la llegada del Señor Jesús hasta la casa de Anás, sumo sacerdote del Sanedrín, hijo de Sett, y que fue designado sumo sacerdote entre los años 6 y 15 d. C.
En este lugar, Cristo no solo sería interrogado, sino también tratado como un delincuente. Es allí donde la autoridad romana comienza con sus agresiones físicas y verbales.
La tercera iglesia tipifica la llegada de Cristo a la casa de José ben Caifás o Yosef Bar Kayafa, sumo sacerdote judío, de la secta de los saduceos.
Allí el Jesús sería negado por Pedro, tal como se reseña en la Biblia en Mateo 26:69-75.
Además, en la casa de Caifás, donde comienza a desfilar una cantidad de testigos que dan falsos testimonios sobre las acciones de Jesús en Jerusalén y en tergiversar la información de Cristo por autodenominarse el Hijo del Padre, es decir, el Hijo de Dios.
Ante Pilatos, se conmemora la cuarta iglesia. En presencia del quinto prefecto de la provincia romana de Judea y gobernador de la región es donde a Jesús lo acusan por delitos religiosos, específicamente por sacrilegio o profanación de lo sagrado. A su vez, por alborotar a la población en contra de las políticas del imperio.
El quinto templo emblematiza el encuentro de Jesús con el rey de Judea, Herodes, quien junto a sus seguidores lo hostigaron por sus afirmaciones de ser el Rey de los judíos. Sin embargo, al negarse Cristo en contestar su interrogatorio, el monarca decidió despreciarlo y burlarse de él vistiendo con prendas reales.
Posteriormente, al no encontrar cargos en su contra, decide enviarlo nuevamente con Pilatos, puesto que no quería repetir su historia y desfavorecimiento por parte de su pueblo tras el caso de Juan el Bautista.
La sexta iglesia representa el juicio de Jesús ante el pueblo judío. Es allí, ante Pilato y por orden del gobernador, que Cristo es azotado 300 veces.
Al no saciar el requerimiento de castigo de los sumos sacerdotes, la máxima figura del cristianismo es coronada con espinas y condenada a muerte, luego de que la muchedumbre decidiera la liberación de Barrabás, un ‘forajido’ rural que gozaba del aplauso popular a pesar de haber sido señalado como ladrón y homicida (Mateo 27: 15-23).
Finalmente, el último templo tipifica el recorrido de Jesús de Nazareth desde la casa de Poncio Pilato hasta el Monte Calvario, llevando consigo la cruz a cuestas. En este templo se conmemoran, a su vez, las 14 estaciones del Viacrucis y finalmente la crucifixión de Cristo, al lado de dos ladrones de la época: Dimas, a su derecha, y Gestas, a su izquierda.
Con información de Infobae
