Por sus propiedades medicinales y su sabor refrescantes, la menta se ha convertido en un ingrediente de recetas; y un elemento usado para mejorar algunos síntomas de enfermedades
Su delicioso sabor, y la frescura que aporta, hacen de la menta una planta muy usada; pero además tiene propiedades antiinflamatorias, expectorantes, antisépticas, analgésicas, antibacterianas o antitusivas, razones por las cuales ha sido usada desde la antigüedad para aliviar enfermedades.
Composición de la menta
La menta tiene una composición a base de agua, fibra, minerales como el calcio, el potasio, el cobre o el magnesio; Omega 3 y vitaminas A, B, C y D.
Se estima que apenas posee 0,03 gramos de grasa y 0,48 gramos de carbohidratos.
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Alivia trastornos digestivos y respiratorios
De las principales propiedades de la menta destacan aliviar los trastornos digestivos; por eso recomiendan las infusiones de dicha planta ayudan con las digestiones pesadas.
Por ser un remedio 100% natural que reduce la hinchazón abdominal provocada por los gases y las flatulencias.
Otro beneficio es que reduce la irritación intestinal, propia de afecciones como la colitis o la enfermedad de Crohn, y evita los vómitos y los cólicos abdominales.
Su delicioso su aroma activa las glándulas salivales de la boca y aquellas que segregan las enzimas digestivas.
El componente de mentol ayuda a descongestiona las vías respiratorias y alivia trastornos tan frecuentes como el asma o los resfriados comunes.
Es muy utilizada para combatir la irritación que causa la tos crónica; tiene un efecto refrescante que enfría y calma la garganta, la nariz y el resto de canales respiratorios, reseña el portal Alimente.
Contraindicaciones de la menta
A pesar de sus múltiples beneficios, si se emplea de manera excesivamente, la menta puede acarrear efectos secundarios bastante graves.
- El té de menta no debe usarse en el embarazo ni en la lactancia.
- No se le puede proporcionar a niños, pues posee una toxicidad muy considerable y el organismo de estos no podría asimilar estos compuestos, indica Unisima.
- En diabéticos, el té de menta puede causar hipoglucemia, es decir, disminuir excesivamente la glucosa de la sangre.
- Puede causarse problemas vesiculares y trastornos en el sueño.