Según Bloomberg, la delegación oficialista aceptó reanudar el diálogo con la esperanza de que Estados Unidos alivie las sanciones, sobre todo las impuestas al sector petrolero
La administración de Nicolás Maduro y una coalición opositora enviarán delegados a México para reabrir las negociaciones a partir de este sábado 26 de noviembre, adelanta extraoficialmente Bloomberg.
De acuerdo a la agencia de noticias, personas familiarizadas con la situación, y que pidieron permanecer en el anonimato, se lo hicieron saber, ya que el proceso no ha sido anunciado formalmente.
Las conversaciones incluirán condiciones para las elecciones presidenciales de Venezuela de 2024 y podrían desbloquear 2.700 millones de dólares de fondos gubernamentales actualmente congelados por las sanciones, dijeron.
No obstante, que el anuncio oficial se efectúe a partir de este miércoles por parte del mediador Noruega, que será reforzado por las delegaciones venezolanas. El plan inicial es que las partes se reúnan en México cada 15 días.
Las delegaciones estarían lideradas de nuevo por Jorge Rodríguez del lado del oficialismo y por Gerardo Blyde por la Plataforma Unitaria Democrática (oposición).
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Noruega se negó a comentar sobre los detalles de las negociaciones. Ni el gobierno ni los portavoces de la oposición respondieron de inmediato a los mensajes en busca de comentarios, reseñó Bloomberg.
Alivio de sanciones, condicionado
Se espera que las dos partes abran las reuniones mediante la firma de un acuerdo que desbloquearía $2,700 millones de fondos gubernamentales actualmente congelados en cuentas internacionales que se utilizarían para reconstruir redes eléctricas y financiar proyectos de salud, entre otras iniciativas. La ONU supervisaría el trabajo y administraría la cuenta, dijeron las personas.
El gobierno del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha dicho repetidamente que reevaluaría su política de sanciones si el gobierno de Maduro hiciera concesiones políticas, comenzando con el regreso a las reuniones de México. Un primer paso puede ser una licencia limitada para Chevron Corp. que aflojaría algunas restricciones financieras sobre las operaciones del perforador con sede en California en Venezuela.
Se conoció que la entrega de licencias para Chevron y otras petroleras probablemente fue un acuerdo de Kamala Harris en la Cumbre de las Américas.
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En un contexto de desplome de la producción petrolera
La relajación de las restricciones económicas internacionales podría ayudar al país a comenzar a extraer más petróleo. A pesar de tener las reservas de crudo más grandes del mundo, la industria petrolera de Venezuela ha sido destruida por años de mala gestión, falta de inversión y sanciones, que prohíben las actividades financieras de las empresas estadounidenses en el país.
La producción se ha desplomado a alrededor de 660.000 barriles por día desde más de 2 millones de barriles por día hace una década.
El Departamento de Estado de EE.UU. no respondió de inmediato a los mensajes en busca de comentarios.
Maduro tiene una necesidad urgente de efectivo para mantener la recuperación de una economía aún exigua, lo que ha provocado que más de 7 millones de personas salieran del país.
Varias rondas anteriores de conversaciones colapsaron, la más reciente en octubre de 2021, cuando Maduro se alejó de la mesa después de que las dos partes alcanzaran solo acuerdos menores.
