La hija de la expresidenta de Bolivia, Jeanine Áñez informó sobre la salud de su madre, pero exigió conocer a detalle el tratamiento que le están suministrando
Carolina Ribera, la hija de la expresidenta Jeanine Áñez, habló este lunes sobre el cuadro de salud de su madre e informó que está “muy afectada y sedada”.
“Está muy delicada, totalmente dopada y sedada, mi madre no se acuerda lo que pasó”, dijo la joven en una entrevista con el medio boliviano Unitel.
La exmandataria interina, quien está siendo asistida en el penal de Miraflores, presenta un cuadro de depresión severa.
Además de una crisis nerviosa luego de que intentó quitarse la vida, detalló su hija.
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Luego de este incidente, las autoridades permitieron que un familiar de Áñez la acompañe dentro del penal.
En ese sentido, Carolina Ribera, advirtió que aun no les han entregado el historial médico de su madre.
“Hasta ahora no me dan un informe médico, su historial clínico, no me informan nada. No dejan que personas de la oposición la vean”, denunció.
Alertó que no sabes cuáles medicamentos le dieron, ni el tratamiento que le están suministrando.
“Ella ya tiene comprometido también el corazón”, dijo Ribera a la revista.
Denunció que la expresidenta de Bolivia, no solo está delicada de salud, sino también recibió tortura psicológica.
Responsabilizó que la violencia emocional que recibió su madre, fue por parte del régimen penitenciario.
Parte médico de Áñez
La Dirección de Régimen Interior confirmó el sábado que la salud de Áñez es estable.
Aseguró que recibe la atención médica necesaria luego de que haberse autolesionado en el brazo.
Las heridas fueron superficiales y su salud no corre riesgo, informó el parte de las autoridades gubernamentales.
El funcionario afirmó que no iba a tolerar que el cuadro de salud de Áñez se convirtiera en un tema político.
“Áñez goza de un completo estado de salud y bienestar, lo dijo uno de sus hijos”, señaló Del Castillo ante los medios de comunicación.
“Aquellos que quieran hacer política con el estado de salud de un privado de libertad, no lo vamos a tolerar”.
Tras la vista oficial al penal, ONU Bolivia ratificó que Áñez “refirió sentirse físicamente debilitada y profundamente afectada emocionalmente”.
El miércoles fue la tercera vez que trasladaron al hospital en dos semanas a la expresidenta interina.
En ese momento, le realizaron estudios de tórax y se evaluó su cuadro de hipertensión.
