La empresa nipona Space One sería la primera en colocar un equipo del Gobierno en órbita
Aunque no lo asumen como un fracaso, un cohete de una empresa privada que llevaría un satélite del gobierno de Japón al espacio, estalló este miércoles, a tan solo segundos de haber despegado.
El evento ocurre en la península de Kii, una zona montañosa y boscosa en la prefectura de Wakayama, cuando desde el centro de lanzamiento de la empresa Space One, despegó el cohete “Kairos”.
#13Mar
— ImpactoVenezuela (@ImpactoVE) March 13, 2024
🇯🇵 COHETE EXPLOTA DESPUÉS DE DESPEGUE
Un cohete de una empresa privada japonesa explotó segundos después de iniciar su despegue en el oeste del país. Su intención era colocar un satélite en órbitapic.twitter.com/17L2fv61I1
La nave espacial de unos 18 metros despegó a la hora prevista y sin ningún contratiempo, pero a los escasos segundos de despegarse de la tierra, se produce una explosión, originando una gran bola de fuego.
De inmediato el cielo se llenó de una densa nube gris y llamaradas por doquier, cayendo en los alrededores de la base los pedazos de cohete en llamas.
Los sistemas de seguridad funcionaron y los extintores, así como el personal de seguridad, lograron sofocar las llamas en los alrededores y dentro de la base.
Japón llegó a la LUNA https://t.co/FO9IRFywIk pic.twitter.com/Om7PyuWGOu
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La misión de la empresa emergente Space One tenía como objetivo colocar en órbita un satélite del gobierno japonés, algo inédito para la industria privada aeroespacial del país.
Space One dijo en un comunicado que había decidido “anular el vuelo” y que abrió una investigación de lo sucedido.
“Queremos aceptar este resultado con visión de futuro y emprender nuestro próximo desafío”, declaró a periodistas el presidente de la empresa, Masakazu Toyoda. Insistió en que Space One no utiliza la palabra “fracaso”.
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La firma desea “contribuir con la expansión de los servicios espaciales” mediante lanzamientos satelitales exitosos con sus cohetes, agregó.
En febrero, una empresa de Houston posó la primera nave espacial estadounidense en la Luna en más de 50 años, y la NASA depende cada vez más de los cohetes fabricados por SpaceX, de Elon Musk.
Pero abundan los fracasos. El año pasado, otra empresa emergente japonesa, ispace, intentó en vano convertirse en la primera compañía privada en posar en la Luna.
La empresa dijo que perdió el contacto con su nave en lo que calificó como un “aterrizaje forzoso”
Con información de AFP
