Entre 1% y 15% de los casos de dolor de vientre presentan más intensidad, según el especialista Juan Carlos Pons
El cólico menstrual o dolor de vientre, es un padecimiento que afecta a unas 180 millones de mujeres en el mundo y una de las causas principales es la endometriosis.
Juan Carlos Pons, ginecobstetra especialista en endometriosis y fertilidad, explicó que “una de cada 10 mujeres padece de endometriosis y de estas la mitad de los casos son síntomas muy perceptibles. El más frecuente es el dolor durante el período menstrual, conocido como dismenorrea“.
Recordó que la “endometriosis es la proliferación de tejido endometrial fuera de su cavidad, en sitios que anatómicamente no corresponden”.
Básicamente, estos tejidos “pueden encontrarse en la cavidad pélvica y en la abdominal, específicamente en los ovarios, trompas, fondo de saco posterior. También se puede encontrar en vejiga, recto, vagina e intestino”, agregó el experto, en nota de prensa.
Pons comenta que “estos tejidos son capaces de producir su propio estrógeno y una peritonitis química que se manifiesta como una distensión abdominal y dolor pelviano asociado a las reglas (período menstrual).
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Qué produce el dolor
Resalta que “el tejido extraño es captado por el sistema inmunológico que produce una serie de neuro químicos inflamatorios que estimulan la proliferación de vasos, nervios y que crean una sensibilidad dolorosa y distorsión de la anatomía pélvica normal”.
Por eso, “esta patología es una causa importante de dolor pelviano crónico y de infertilidad”.
En cuanto a los síntomas, dijo que “depende de la extensión, ya que estos focos de endometriosis pueden estar en la cavidad peritoneal o alojarse en ovarios, intestino, vejiga presentándose como adherencias. Por ello es que se habla de grados desde los compromisos leves hasta severos”.
Alertó que se trata de una condición que “no se previene y puede ser hereditaria. Si la madre sufre de endometriosis hay una alta probabilidad que las hijas o hermanas que no han podido tener hijos la padezcan”.
El diagnóstico
El médico informa que para realizar el diagnóstico “se hace a través de ecografía, resonancia magnética o laparoscopia, en conjunto con el cuadro clínico que presente”.
“Además, es una enfermedad que se presenta en una de cada diez mujeres en edad reproductiva y que modifica sustancialmente la calidad de vida”, dijo.
Pons recomienda “la visualización de esta enfermedad y por eso es importante mejorar la penetración y difusión para entender que las reglas dolorosas no son normales”.
Sobre la fertilidad y la relación con endometriosis, aclaró que “no es cierto que las mujeres no puedan quedar embarazadas, pero sí presentar problemas para lograrlo”.
Sin embargo, “la indicación actual es la cirugía con técnica excisional (radical) con preservación de órganos reproductivos, previo al procedimiento de reproducción asistida. A partir de allí se estima que las pacientes podría mejorar su fertilidad”, aseguró.
Exceso de prostaglandina
Algunos estudios indican que la dismenorrea puede estar relacionada también con un exceso de producción de prostaglandinas. Estas hormonas, que acentúan las contracciones de los músculos uterinos, podrían explicar el dolor intenso.
Aunque todas las mujeres pueden sufrir dismenorrea, es más frecuente que aparezca en aquellas que fuman, las que tienen sobrepeso, que han tenido la menarquia o primera menstruación antes de los 11 años, o aquellas que consumen alcohol durante la menstruación.
En la actualidad, este trastorno tiene una repercusión importante en la vida de la mujer, ya que es causa de absentismo laboral, consulta médica y automedicación, señala el portal Cuidateplus.
Uno de los motivos más frecuentes de consulta en el ginecólogo es el dolor menstrual.
