Donald Trump ha sido un presidente polémico, pero su insistencia de fraude y su exigencia de reconteo de votos, exacerbó los ánimos de quienes lo rechazan
Este miércoles arrestaron a decenas de personas en Nueva York que manifestaron en contra de Donald Trump, que según los últimos conteos, su rival Joe Biden lo aventaja en la carrera por mantenerse en la Casa Blanca.
Según EFE, la Policía de Nueva York confirmó 20 detenidos.
Alegó que que «intentaron apropiarse de una protesta pacífica encendiendo fuegos, lanzando basura y huevos en Manhattan».
En Twitter el cuerpo de seguridad dijo valorar la «libertad de expresión» y priorizar la «seguridad» ciudadana.
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Los manifestantes recorrieron las calles aledañas al parque Washington Square Park, en la zona suroeste de la Gran Manzana.
Gritaban consignas como, «No Trump, No KKK (Ku Klux Klan), No Facist USA» y «No hay justicia, no hay paz. Maldita policía racista».
Agentes, montados sobre bicicletas, arrestaron a varios de ellos por estar ocupando la calzada.
Tras dispersarse buena parte del grupo, cerca de medio centenar de policías antidisturbios acorralaron a los manifestantes.
Esta situación ocurrió exactamente a la altura de la calle West 8 con la Quinta Avenida.
Allí comenzaron a cargar contra ellos e iniciaron detenciones de los ciudadanos, que participaban en una protesta pacífica.
«Shame on You, The World is Watching» (Te debería dar vergüenza, el mundo te está observando), coreaban antes del arresto.
Se vivieron además momentos tensos cuando otros manifestantes quemaron varias bolsas de basura amontonadas en las calles, que los bomberos acudieron a apagar rápidamente.
La Policía colgó en las redes varias fotos de basura ardiendo y destacó que ese tipo de vandalismo «pone a otros en riesgo y no será tolerado».
Aseguran que su foco es «desescalar la situación» para evitar mayores daños.
Mientras, otra protesta marchaba por las avenidas de la zona central de Manhattan, flanqueada por agentes, donde se proclamaban lemas contra «todo el sistema».
Los arrestos se producen después de que el comisario Dermot Shea, advirtiera de la política de «cero tolerancia» ante actos violentos tras las elecciones presidenciales.
