Las pequeñas de apenas 8 años, con la inocencia que solo el rostro de un niño refleja, le dicen a la patrulla fronteriza que llevan un día sin comer
Sin padre, sin madre, solas con una mujer, dos niñas hondureñas cruzaron el Río Grande y han logrado la travesía de llegar a Texas.
En manos de la Patrulla Fronteriza, las pequeñas, de apenas ocho años, narran que la mamá de una y la tía de la otra, se encuentran en Los Ángeles, California esperándolas.
Algo confundidas, las dos niñas dicen que han caminado desde Honduras y que pasaron un día en México. Le comentan al guardia que tienen un día sin comer y solamente les acompaña un cuarto de botella individual de agua.
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Narran que “con unas cosas de piscinas” pudieron cruzar el caudal del río, junto a otras personas que aparentemente no guardan ningún tipo de nexo con ellas.
Son miles las historias que se han invisibilizado con la vorágine de la crisis sobre la migración en América Latina. Trata de personas, secuestros, muertes y violaciones, son el día a día de miles de personas de diferentes nacionalidades, que buscan en Norteamérica el afamado “sueño americano”.
Detención de migrantes
Han pasado solo unos días desde que la Corte Suprema de Estados Unidos dictó un fallo a favor de los estados de Texas y Louisiana, que solicitaban derogar la directriz del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, con respecto a la detención de migrantes ilegales que entraban en Norteamérica.
