El PSUV en su primer boletín asegura que son 3.5 millones de personas las que participaron en la jornada electoral para elegir sus candidatos. Pero más allá de los números, lo que abundó en los centros de votación fueron golpizas, encontronazos y denuncias a granel de compra de votos y voluntades
Violencia desmedida, irregularidades y ventajismo marcó la jornada de elecciones primarias que realizó el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) para elegir a los candidatos de cara a las elecciones convocadas para noviembre de 2021.
Las bases del PSUV en todo el país protagonizaron varios encontronazos en los centros de votación. Las divisiones del partido, de la que hablan expertos, se hicieron notar durante toda la jornada.
La madrugada de este lunes, el primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, ofreció el primer balance de las elecciones internas y aseguró que 3.5 millones de personas participaron en el proceso.
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“Han manipulado la idea de que en Venezuela hay una dictadura. Aquí lo que hay es la dictadura de los votos”, dijo Cabello.
Aseguró que estas elecciones “le dieron fuerza al carácter democrático de Venezuela”.
Esto, pese a la cantidad de videos que circularon en las redes sociales de golpizas y encontronazos de los seguidores del partido.
Como siempre sucede en las jornadas electorales que realiza el partido de Nicolás Maduro, hubo denuncias en las redes sociales de trabajadores de las instituciones públicas que los obligaron a participar.
“Hubo presión y coacción”, expresaron en videos publicados en las redes sociales.
Además de trasladar y ofrecer bolsas de comida y dólares a las personas para que abultaran las colas y votaran en los centros de votación.
