Una visita al odontólogo terminó con un desenlace fatal para una joven venezolana que perdió la vida como consecuencia de una infección generalizada
Un shock séptico, tras extraerse una muela en una clínica dental clandestina de Chorrillos, Perú, acabó con la vida de la venezolana Leidy Contreras, de 20 años.
El deceso de la joven ocurrió el domingo 16 de abril en horas de la noche, luego de permanecer 3 meses en cuidados intensivos tres sufrir un shock séptico tras extraerse una muela.
Se trata de una triste historia que ha conmocionado a Perú, y que deja en evidencia el peligro de estas clínicas clandestinas que ponen en peligro a los pacientes que acuden a ellas.
La versión de prensa indica que la joven de 20 años acudió a la clínica Quirodent en Chorrillos para extraerse una muela, sin tener conocimiento que el lugar no contaba con los permisos correspondientes y trabajaba de manera clandestina, reseña El Informante Perú.
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La hermana pide justicia
La hermana de la víctima exige justicia y pide ayuda para devolver las 57 unidades de sangre utilizadas durante su internamiento en el hospital Loayza.
La hermana de la joven critica la falta de responsabilidad por parte de los médicos que atendieron a Leidy en la clínica Quirodent.
“Lo que los doctores nos decían era que su deterioro iba en progreso, iba en decaída y obviamente el daño que tenía era irreversible y en cualquier momento podía fallecer. Desde el principio nos habían dicho, pero en estas últimas semanas su deterioro fue en caída, fue fuerte. Obviamente, ya su cuerpo no aguantaba tanto y falleció anoche”, dijo su hermana ATV Noticias.
Necesitan ayudan para pagar
En otro momento, la familiar de Leidy pidió ayuda para devolver las 57 unidades de sangre al hospital Loayza. “La atención en el hospital siempre fue buena. Hicieron todo lo posible. Ahorita tengo que hacer cancelación de sangre, a ella le transferían diario. Son 57 unidades, debo cancelarlas, porque de lo contrario no me dan el cuerpo”, indicó.
La experiencia de Leidy Contreras deja la lección sobre la importancia de verificar la legalidad y profesionalismo de cualquier centro médico antes de someternos a cualquier procedimiento.
La hermana de la víctima indicó que “Con respecto a estos doctores de la clínica Quirodent, no han ido a la tercera citación. Uno de ellos fue a la última, pero dijo tantas cosas con palabras técnicas que rechazaron su declaración y volvieron a darle una nueva cita. El otro doctor se justificó con cosas que su abogada estaba enferma y no pudo asistir. Quieren que su declaración sea virtual cuando han contratado un buffet de abogados y ponen estas excusas baratas”.
Queda de parte de las autoridades peruanas, tomar las medidas para evitar que lugares clandestinos continúen operando y poniendo en riesgo la salud y vida de las personas.
