El Pollo Carvajal tiene varias cartas bajo la manga para evitar su extradición a EE.UU. A tal punto que la justicia de España puede abrir causas que estaban cerradas por falta de pruebas, en contra de Podemos
El exjefe de la Dgcim, Hugo Carvajal, alias El Pollo, implicó este lunes a dirigentes del partido español Podemos, en presuntas actividades ilegales relacionadas con el financiamiento del chavismo hacia esa organización.
Estos son algunos detalles de la comparecencia de Carvajal ante la Audiencia Nacional de España, según “fuentes jurídicas” citadas por el diario El Mundo.
“En la declaración, Carvajal ofreció datos sobre Podemos, cuya financiación por parte del régimen chavista ya había estado bajo la lupa de los investigadores”, señala la publicación.
El juez instructor le dio “un plazo breve” para que reúna documentos que respalden sus afirmaciones sobre las ilegalidades que salpicarían a dirigentes de Podemos y el resto de datos sobre terrorismo.
Según esas fuentes, Carvajal se comprometió a hacerlo. Dijo tener la información en varios pendrives y que la misma afectaba a varios países.
Fuentes jurídicas aseguraron que sus palabras contenían afirmaciones “de gran relevancia” sobre el partido fundado por Pablo Iglesias, pero que se hicieron sin respaldo documental.
El Pollo habló durante algo más de una hora ante el juez Manuel García-Castellón. Lo hizo a petición propia, después de transmitir al juzgado que estaba en disposición de proporcionar información de interés para la justicia española.
Carvajal acompañó su petición de comparecencia de una solicitud para ser considerado testigo protegido, una medida sobre la que aún no hay decisión judicial.
La causa en la que fue citado se abrió tras su arresto en España en 2019. Estaba orientada a los vínculos internacionales de ETA que pudiera destapar.
Según El Mundo, Carvajal también ofreció información relacionada con el grupo terrorista Hezbolá.
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No es imputado
La comparecencia se declaró “secreta” y, aunque Carvajal acudió acompañado de su abogado, no lo hizo como imputado.
Pero, lo que dijo podría implicar la reapertura de las diligencias que la Audiencia puso en marcha en 2016 sobre la financiación de Podemos.
Aquella causa no prosperó, pues apenas se aportaron recortes de prensa a la denuncia. Por ello quedó provisionalmente archivada. Ahora podría revivir si el juez García-Castellón estima que lo que aporta Carvajal tiene entidad suficiente.
El movimiento de El Pollo para colaborar con la Justicia llega cuando está al borde de ser extraditado a EE.UU., donde se le reclama por narcotráfico.
Al exhombre de confianza de Hugo Chávez y de Nicolás Maduro lo capturaron la semana pasada. Pasó dos años oculto para evitar la entrega acordada por la Audiencia.
Tras la detención, además de presentar todos los recursos posibles en la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo para frenar su entrega, Carvajal volvió a ofrecer su colaboración.
Esa misma oferta la hizo tras su primer arresto al llegar a España. Entonces su propuesta de ayuda se centró en las conexiones entre ETA y las FARC.
Tras su paso por prisión, cambió de estrategia. Compareció en la Audiencia como estaba comprometido, pero la colaboración quedó en nada.
Fuentes jurídicas consideran que, si ahora la colaboración es efectiva, Carvajal podría retrasar su entrega.
Durante los últimos días, Carvajal había trasladado a su entorno que estaba dispuesto a contar datos sobre la supuesta financiación irregular de Podemos a través de Venezuela.
Aseguraba que también podía acreditar la intervención de autoridades cubanas.
Asimismo, se mostró en disposición de facilitar datos sobre los pagos que recibió el ex embajador en Venezuela durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Raúl Morodo.
