La 50 edición de los premios, en los que Taylor se lució, recordó también dos momentos icónicos de la música
Un viaje a la nostalgia y al reconocimiento tuvo la 50 edición de los American Music Awards, que se celebró el domingo en Los Ángeles; en la que Taylor Swift se convirtió en la reina de la noche.
Taylor se llevó seis premios a su casa, incluido el de artista del año. Asimismo, con esta cantidad de premios se convirtió en la artista más premiada en la historia de los American Music Awards.
El premio Icon Award se lo entregaron a Lionel Richie, quien ganó 17 galardones a lo largo de su carrera. Además recibió un homenaje.
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Entre los latinos, destacó Bad Bunny quien era el hispano más nominado. Se llevó dos premios. El de Álbum latino favorito y el de Artista latino masculino favorito. Tal y como sucedió unos días con los Grammy Latinos, no estuvo en la ceremonia.
Mientras Taylor celebraba sus triunfos, también tuvo oportunidad de corear desde su butaca durante el homenaje a Lionel Ritchie. El tema We are the world fue el escogido para rendirle tributo. Al final del mismo, el propio cantautor se subió a la tarima para terminar de corear junto a Stevie Wonder y un grupo de intérpretes.
Otro de los momentos emotivos fue cuando Pink salió a escena y recordó a Olivia Newton-John, fallecida hace unos meses debido al cáncer de seno. Su interpretación de Hopelessly devoted to you fue de los mejores momentos de la noche.
