Varios países como Colombia aceptaron recibir a la perseguida población afgana. El uso de la burka y otras costumbres están en el tapete. Conozca los detalles del experimento social
Una mujer vestida con una burka azul brillante recorrió las calles del centro de Medellín ante las miradas de los transeúntes que reaccionaron desde la compasión hasta el recelo.
La mujer con un atuendo similar al que usan las afganas, caminó por Junín, La Playa, Parque Berrío y hasta por las escaleras del Metro.
Se trataba de la artista Isabel Palacio, quien aceptó el experimento social que le propuso un amigo fotógrafo, Daniel Alvarado.
El objetivo fue conocer la reacción de los transeúntes, a propósito de la llegada de los refugiados al país.
Artista atrapada en una burka
Isabel Palacio, quien hace performance, contó que la experiencia fue muy retadora al ver la cara de asombro de algunas personas, citó la cadena RCR.
También tuvo la oportunidad de escuchar sus comentarios y sentir en carne propia lo que es vivir con un burka.
“Me gusta mucho la fotografía de desnudo y esto fue un choque para mí. Sentí demasiado calor. Me recogí el cabello hacia atrás para que no se me viniera a la malla y no me lo podía tocar. No podía acceder a mi propio cuerpo, pese a que lo tenía cubierto y separado del resto del mundo”, señaló.
El fotógrafo Daniel Alvarado, creador de la iniciativa, estuvo muy cerca de Isabel para retratar la reacción de los transeúntes.
Lea También: FUERON DOS EXPLOSIONES: al menos 10 muertos y decenas de heridos en Kabul
Así reaccionó la gente
Y de esta manera escuchar comentarios como: ‘cuidado, puede llevar explosivos’, ‘qué pesar de esa mujer’ o ‘llegaron los primeros refugiados’.
“Un señor que vendía dulces le dijo: ‘tranquila, mi amor, acá no tienes que utilizar eso’.
Mientras que una mujer venezolana sintió empatía con ella, que también parecía migrante.
Por su parte, un hombre dijo: ‘vea, ahora las mujeres de Medellín se van a vestir así'”.
Habló el fotógrafo
En las redes sociales del artista compartió otras reacciones de transeúntes al ver la representación de la mujer Afgana con la burka en las calles.
“Tuvieron reacciones muy diversas, tales como fijar sobre ella miradas intrigantes, acusantes, sorpresivas y despectivas”, publicó Alvarado.
Detalló que las miradas que estuvieron acompañadas de comentarios como: “ya llegaron los primeros refugiados”, “ay, una Afgana”, “es una mujer Musulmana”.
Otras expresiones fueron: “un talibán, hay que tener cuidado porque puede llevar explosivos”, “eso es una burka”, “qué pesar”, “eso es una moda”.
Y otras más fueron “tranquila mi amor, qué aquí no es necesario vestirse así, si quiere puede salir empelota” y “tranquila mi amor que nosotros le damos bala a los talibanes”.
