El sistema de pagos digitales se está tratando de implementar en el transporte público, ante la falta de efectivo
Nicolás Maduro, está presionando a los bancos para que implementen sistemas de pago digitales. Esto porque la hiperinflación provoca una escasez crónica de efectivo.
La información la dio a conocer la agencia Reuters que cita a tres personas familiarizadas con el caso. Maduro apunta al sistema de transporte público para aplicar la primera etapa del plan que él llama “el bolívar digital”. Lo hace porque allí se gastan aproximadamente tres cuartas partes de todo el efectivo circulante.
En enero, pidió a los bancos que entregaran terminales de punto de venta al sistema de metro de Caracas. “Pagar las tarifas de transporte es complicado porque no hay efectivo”, dijo Marina Ospino. ella es vendedora de medio tiempo y madre de dos hijos, mientras viajaba en autobús. “Y para hacer un recado, necesitas tener una fortuna”.
Si bien los pagos digitales para el transporte público son la norma en todo el mundo, Venezuela nunca adoptó un sistema de tarjetas para este propósito.
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Imita a Argentina
La medida de Maduro es similar a una decisión de Argentina azotada por la inflación hace una década. Se usaba una tarjeta de pago ante la escasez de monedas.
La escasez de efectivo y la hiperinflación de Venezuela han llevado a la dolarización informal en la economía dependiente del petróleo. La cantidad de efectivo actualmente en circulación asciende a solo el 2% de la oferta monetaria, frente al 7% de hace unos años, según el banco central.
Los planes para impulsar los pagos digitales han sido lentos debido a los altos costos de las terminales de punto de venta y las tarjetas de débito importadas, dijeron fuentes de la industria.
En ausencia de bolívares, muchos usuarios del transporte público están recurriendo a dólares estadounidenses para pagar las tarifas. Es común ver a los asistentes de los conductores de autobús que cobran las tarifas con fajos de billetes verdes. “Eso es lo que nos ha salvado, el dólar”, dijo José Espinoza, un conductor de autobús en el oeste de Caracas. “Pocas personas tienen bolívares en efectivo … Ahora todo el mundo lleva dólares”.
