Luego de la rebelión del grupo Wagner, Putin hizo advertencias y acusó a su líder de traición a la patria
“Desde el comienzo de los acontecimientos, se tomaron medidas siguiendo mis instrucciones directas para evitar un gran derramamiento de sangre”, dijo el presidente ruso, Vladimir Putin.
Putín se refirió a la rebelión abortada del grupo paramilitar Wagner y las instrucciones que dió de evitar “un derramamiento de sangre”, al tiempo que agradeció a los rusos su “patriotismo” y su unidad.
El presidente ruso exhortó a los combatientes de Wagner unirse al ejército o irse a Bielorrusia, luego de que el grupo paramilitar llevara a cabo una rebelión armada.
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Advirtió que “tienen la posibilidad de continuar sirviendo a Rusia con un contrato con el ministerio de Defensa u otros organismos encargados de hacer cumplir la ley o regresar con su familia y seres queridos (…) Quien quiera puede ir a Bielorrusia”.
También acusó al jefe de Wagner, sin nombrarlo, de haber “traicionado su país y su pueblo”, al mismo tiempo que mentía a sus hombres, cita AFP.
Occidente se lava las manos
Por su parte, el presidente estadounidense Joe Biden aclaró que los occidentales “no tuvimos nada que ver” con la fallida rebelión del jefe del grupo Wagner en Rusia este fin de semana.
Biden dijo a los periodistas:”Convoqué a nuestros aliados clave en una llamada de Zoom”.
Agregó que “coincidimos en que teníamos que asegurarnos de no dar a (el presidente ruso Vladimir) Putin ninguna excusa (…) para culpar de ello a Occidente y para culpar de ello a la OTAN”.
“Dejamos claro que no estábamos involucrados. No tuvimos nada que ver, era un problema dentro del sistema ruso”, recalcó.
