Agleisde José García Mendoza (23) y Leandro José Rodríguez Blanco (23) intentaron quemar a varios hombres, mujeres y niños para cometer un robo. Un tribunal de Lara decidió imputarlos por homicidio intencional calificado, con alevosía y por motivo innoble en grado de frustración y de coautoría
A solicitud del Ministerio Público privaron de libertad a Agleisde José García Mendoza (23) y Leandro José Rodríguez Blanco (23). Se les responsabiliza por el presunto intento de homicidio de 16 personas en el estado Lara. Se trata de dos mujeres, cinco hombres y nueve niños de entre 10 meses y 13 años.
Los hechos ocurrieron la madrugada del 30 noviembre en la parroquia Yacambú, municipio Andrés Eloy Blanco de la entidad.
Ese día, García Mendoza y Rodríguez Blanco se presentaron en el lugar en compañía de otros tres hombres. Iban armados con escopetas y bajo amenaza de muerte sometieron a la pareja que estaba en el lugar. También a su hija y yerno, además tres obreros y nueve niños.
A todos los trasladaron a un galpón, los amarraron de manos y pies para posteriormente rociar el lugar con gasolina y prenderle fuego.
Las víctimas lograron zafarse de sus ataduras y escaparon. Tras abandonar el lugar se percataron de que los sujetos robaron un motor de trilla, 10 sacos de caraotas de 50 kilos cada uno. Además de 10 sacos de café verde de 46,2 kilos cada uno, dos plantas Caterpillar, dos plantas eléctricas pequeñas, un compresor de aire y 15 pipas rellenas de maíz.
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También se llevaron 30 litros de gasoil, ocho pipas de caraotas, 20 bombas de fumigar, un cajón de Toyota. Igualmente, cargaron con 12.000 kilos de cal agrícola y un elevador de café.
Cuatro días después de los eventos, las víctimas denunciaron los hechos ante la Policía Nacional. El organismo designó una comisión que se trasladó al caserío “El Silencio”. Allí se ubicaban los presuntos implicados. Efectivamente, los efectivos aprehendieron a los hombres y los pusieron a disposición del Ministerio Público.
En la audiencia de presentación, la Fiscalía 6ª del estado Lara los imputó por homicidio intencional calificado. Todo con “alevosía y por motivo innoble en grado de frustración y de coautoría”. También pesa sobre ellos el delito de robo agravado, privación ilegítima de libertad y agavillamiento.
El Tribunal 6º de Control fijó la reclusión en el Centro Penitenciario Sargento David Viloria, ubicado en el municipio Iribarren de la jurisdicción.
