A la expresidenta de Bolivia la acusan por los delitos de “sedición, terrorismo y conspiración”. Todo tras la crisis de 2019 que derivó en la renuncia de Evo Morales a la presidencia
Este lunes trasladaron a la expresidenta de Bolivia, Jeanine Áñez hasta el Centro de Orientación Femenina de Obrajes. Allí debe cumplir su detención preventiva mientras se realice la investigación por un presunto “golpe de Estado” en ese país.
A Áñez la trasladaron desde la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, donde estaba detenida desde el sábado. La llevaron en una vagoneta con un fuerte resguardo policial.
Al llegar a la cárcel de mujeres la expresidenta saludó a los medios de comunicación. Entró rápidamente resguardada por los policías, informo Efe.
La Justicia boliviana dictó el domingo detención preventiva para Áñez por cuatro meses en un penal en La Paz. la misma medida aplica para los dos exministros Álvaro Coímbra, de Justicia y Rodrigo Guzmán, de Energía, en el penal de San Pedro en La Paz.
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Los tres están acusados de los delitos de “sedición, terrorismo y conspiración”. Todo tras la crisis de 2019 que derivó en la renuncia de Evo Morales a la Presidencia.
La Fiscalía boliviana había solicitado seis meses de detención preventiva para Áñez y los dos exministros por riesgo de fuga.
En tanto, el ministro de Justicia, Iván Lima, aclaró que a Áñez la juzgan como exsenadora y no como expresidenta. Aseguró que se busca que se aplique una pena de 30 años de prisión por los presuntos delitos cometidos.