Adrián Velásquez negó que haya blanqueado dinero, aseguró que sus ingresos proceden de sus actividades empresariales. Pero la Audiencia de España cree que no hay motivos para no extraditarle
Adrián Velásquez, el que fuera guardaespaldas de Hugo Chávez, pidió este martes a la Justicia española que no le entreguen a Estados Unidos. Este país le reclama por un supuesto delito de blanqueo de capitales, que él niega haber cometido.
El reclamado, que compareció en la Audiencia Nacional española para su proceso de extradición, aseguró que se fue de Venezuela en 2013 a la República Dominicana. Lo hizo tras recibir amenazas de muerte y se trasladó a España en 2015, donde reside con su esposa y sus dos hijos. Dijo que todos ya tienen nacionalidad española.
Por su parte, la fiscal informó al tribunal de que procede la entrega del reclamado a las autoridades estadounidenses. Estimó que su nacionalidad española, obtenida el pasado mes de abril, la pidió con “fraude de ley”. Argumenta que lo hizo para intentar evitar su extradición a Estados Unidos.
A Velásquez lo detuvieron diciembre de 2020 en España junto con Claudia Patricia Díaz, extesorera de Venezuela y enfermera de Chávez. A ella también la reclama Estados Unidos, pero por un procedimiento independiente al de su pareja.
Ambos se enfrentaron hace años a otro proceso distinto, de extradición a Venezuela. No obstante, la Audiencia Nacional española acabó rechazando su entrega. Consideró que la situación que atravesaba el país podría poner en peligro su integridad.
La fiscal argumentó que sí se cumplen los requisitos para la extradición de Velásquez a Estados Unidos. Dijo que no existe motivación política tras la reclamación y los hechos no son investigados en España.
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Los motivos
Recordó que Estados Unidos reclama al matrimonio por su presunta vinculación con una trama de corrupción entre el 2008 y 2017, reseñó Efe-
El Ministerio Público relató que, según la Justicia estadounidense, Raúl Gorrín, pagó millones de dólares a los extesoreros Alejandro Andrade y Claudia Patricia Díaz y a Velásquez. Lo hizo a cambio de asegurarse una ventaja indebida en la obtención y del derecho a efectuar transacciones de cambio de moneda extranjera con tasas favorables. Esto les posibilitó unos ingentes beneficios de millones de dólares, agregó la fiscal.
Además, destacó que Gorrín traspasó entre 2011 y 2013 de cuentas suyas en Suiza 65 millones de euros a cuentas del reclamado y de su pareja en Florida y Texas. También les efectuó pagos de aviones privados, yates, mansiones, caballos, relojes y otras dádivas.
Adrián Velásquez negó que haya blanqueado dinero, aseguró que sus ingresos proceden de sus actividades empresariales conjuntas con su hermano. Dijo que su pareja no pudo cometer dicho delito, ya que el cambio de divisas es competencia del Banco Central de Venezuela y no de la Tesorería.
Su abogado alegó también que no procede la extradición porque, además, un Juzgado de Madrid está investigando los hechos por los que Velásquez es reclamado por Estados Unidos y que colaboró en todo momento para su esclarecimiento, y en todo caso, estimó que los hechos habrían prescrito
