Instituciones colombianas bajo la lupa por las muertes en extrañas circunstancias de menores de edad de nacionalidad venezolana
Al menos 38 niños venezolanos han muerto, desde 2018, en extrañas circunstancias, mientras se mantienen al cuidado del Instituto de Bienestar Familiar Colombiano, esta problemática dejaría en evidencia la negligencia de la institución y se espera, sean casos aislados de la discriminación.
Dos casos de menores de edad venezolanos, que murieron bajo custodia del ICBF están siendo investigados ante posible negligencia de la institución, agravando la situación de niños, niñas y adolescentes que llegan sin acompañamiento de un familiar o adulto.
Uno de ellos tendría apenas año y medio y cuyas circunstancias de la muerte aún no han sido confirmadas, mientras que el otro de 17 años murió a manos de otro adolescente en medio de una discusión.
Según una investigación realizada por el medio colombiano, El Espectador, desde 2018 han muerto alrededor de 38 niños, 36 de ellos venezolanos, bajo el cuidado de esta institución, siendo situaciones como enfermedades, violencia y casos donde se quitaron la vida, son las causas más comunes y preocupantes.
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No hay políticas claras
Los investigadores escalan la gravedad de esta situación debido a que instituciones gubernamentales como la Defensoría del Pueblo e incluso organizaciones internacionales, como UNICEF o ACNUR, desconocen de estas muertes dejando a la luz la falta de políticas públicas para atender la migración donde los infantes terminan siendo los más afectados.
De acuerdos a diversas informaciones, más de mil niños habrían cruzado la frontera entre Colombia y Venezuela entre 2022 y 2023 sin acompañamiento de un familiar o adulto responsable.
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Son víctimas de violencia y otros delitos
Sin contar, los casi 70 mil ubicados en la frontera entre Colombia y Panamá o el famoso paso del Darien, quedando a la merced de hogares sustitutos donde en algunos terminan siendo víctimas de violencia o abuso.
Hasta ahora Bogotá y el norte de Santander, han registrado 22 de las 38 muertes de estos menores, cuyas edades van desde los 5 hasta 16 años, al mismo tiempo que representantes de la sociedad civil exigen al gobierno el cierre de los hogares sustitutos mientras se esclarecen los casos.
