Lleva 30 años dedicado al negocio de la chicha en La Yaguara, frente a la parada de las camionetas que van Junquito. Nerio Rivera hace país con su historia
Es un hombre humilde, sencillo y trabajador que con dedicación y empeño ha sacado adelante a su familia. Nerio Rivera es el “chichero de Yaguara”.
Trabaja con valores, positivismo, fe y sobre todo con constancia, convencido de ser la clave para salir adelante y triunfar en la vida.
Este vendedor de chicha en Caracas, de pocas palabras, tímido, pero un excepcional ser humano, nació para el trabajo y junto a Mérida, su compañera de vida han logrado sacar adelante su negocio.
“Ha sido una buena compañera, de mucho apoyo y me ha ayudado a salir adelante en todo esto”, dice de su esposa.
Y agrega Nerio Rivera: “tengo 30 años ya en este trabajo, que es bastante bueno y nos ha servido en el nivel económico para la familia, tengo dos hijos, mi esposa y todo..”, cuenta.
“Lo amo, lo quiero, ha sido el mejor hombre en estos 20 años, que me ha dado lo mejor y los tesoros más grandes, mis dos hijos”, cuenta Marisela.
Juntos son la sociedad perfecta. En casa, donde se respira “amor, paz y confianza” preparan la chicha y en La Yaguara la venden.
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Chicha hecha con “amor”
En esta historia de Santiago Gutiérrez para Impacto Venezuela con Nerio Rivera y su esposa Mérida, también cuenta cómo hacen la chicha “Esa olla que vea allí es de 120 litros, se utiliza seis kilos de azúcar diarios, doce kilos de leche… “.
Cerca de 200 clientes diarios y 6 mil chichas al mes resumen la producción de este “delicioso negocio” que se adapta a “lo gustos” de todo tipo de cliente.
Que recibe todo tipo de pago y que busca ampliarse a Plaza Venezuela, “si Dios quiere”, concluye Nerio Rivera.
