Debido a la baja remuneración, el personal también debe ocuparse en otros oficios en las áreas de alimentos, repostería y cosmetología, entre otros
Los bancos de sangre del sector público tienen múltiples deficiencias que van desde el ambiente físico deteriorado, falta de insumos y de personal, hasta de escasez de reactivos para las serologías.
Así lo afirmó Maribel Meléndez, secretaria general de la Sociedad Venezolana de Hematología.
Explica que hay centros donde ni siquiera tienen aire acondicionado ni sillones acordes para la atención de los donantes.
“No cambian las lámparas (para buena iluminación); el personal debe soportar los reclamos de familiares, médicos, pacientes por la falta de respuestas inmediatas”, señaló la galeno.
Aunado a las carencias en infraestructura, señala los cortes de agua o energía eléctrica que terminan dañando los equipos de refrigeración para conservar los plasmas, reseñó La Prensa de Lara.
En cuanto a los insumos médicos, reportó escasez hasta de materiales antisépticos como alcohol y gasas. “No hay ni inyectadoras para tomar las muestras”, alertó.
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Problemas y más problemas
La secretaria general de la Sociedad Venezolana de Hematología instó al Ministerio de Salud a que invierta y actualice los bancos de donantes, como sucede en otras partes de América Latina y el mundo, donde el servicio es automatizado para la localización inmediata de donantes compatibles con los pacientes.
A ese panorama también se suma el déficit de personal debido a la baja remuneración que reciben en el sector público. Por ello, deben ocuparse en otros oficios como alimentos, repostería, cosmética, entre otros, donde consiguen mayores ingresos.
