Un manantial que emite agua y fuego al mismo tiempo tiene propiedades curativas y encendió su propia religión
El manantial de fuego “Yanar Bulag”, que literalmente se traduce como “manantial ardiente”, cerca de la ciudad de Astara en el sur de Azerbaiyán, es un manantial inusual que combina de manera fascinante los dos elementos fuego y agua.
El fenómeno comienza de manera bastante simple. El agua sale gorgoteando de un tubo vertical de metal dentro de un pequeño pabellón, no parece particularmente inusual. Pero cuando se toca el agua con un encendedor u otra fuente de ignición, el líquido mismo se incendiara. Esta propiedad única y entretenida del agua se debe a su alto contenido de metano.
A pesar del metano en el agua, los lugareños dicen que el agua del manantial tiene propiedades curativas.
La gente viene de todas partes de la región para recolectar agua del manantial.
De manera similar, para la gente se ha convertido casi en un rito de iniciación: un trago de agua mientras la parte superior de la tubería se está prendiendo fuego.
La fuente de fuego es solo uno de los muchos sitios extraños en Azerbaiyán que pueden atribuirse a las altas reservas de gas y petróleo del país.
Además de ser una atracción peculiar, la fuente de fuego también evoca el espíritu del zoroastrismo, una religión en la que el fuego y el agua son considerados agentes de pureza ritual.
Hoy en día, el zoroastrismo ya no existe en Azerbaiyán, pero fue en esta región donde se fundó la religión hace 2.000 años.
Lea también: ¡IMPRESIONANTE! El Machu Picchu del Cáucaso