“Me inquietan los crecientes signos de reducción del espacio cívico”, enfatizó la Alta Comisionada para los DDHH de la ONU, Michelle Bachelet, al criticar las acciones contra las ONG’s que prestan ayuda humanitaria y la persecución contra periodistas, medios de comunicación, líderes sindicales y líderes opositores
La persecución de la administración de Nicolás Maduro a periodistas, defensores de DDHH, líderes sindicales y líderes opositores, sigue siendo una preocupación para la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet.
Durante la presentación de un nuevo informe sobre la situación en Venezuela, Bachelet indicó que desde el mes de septiembre de 2020, su Oficina en Caracas ha documentado al menos “66 casos de intimidación, acoso, inhabilitación y criminalización de periodistas, medios de comunicación, defensores de los derechos humanos”.
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Además, “trabajadores humanitarios, líderes sindicales y miembros o partidarios de la oposición, incluidos los miembros electos de la Asamblea Nacional de 2015 y sus familiares”.
“Me inquietan los crecientes signos de reducción del espacio cívico”, dijo.
También expresó su preocupación por que cinco activistas de DDHH, “siguen con cargos relacionados con el terrorismo y el blanqueo de dinero”.
Esto “por haber prestado asistencia humanitaria como parte del Plan de Respuesta Humanitaria de Naciones Unidas”.
Criticó que “más ONGs siguen siendo investigadas por motivos similares”.
“Tan sólo en el mes de enero se ejecutaron al menos 3 operaciones de registro e incautación en los locales de medios de comunicación”.
“En distintos grados, se incautó equipamiento, se cerraron oficinas, se intimidó al personal y se suspendieron emisiones”, agregó.
Considera que estas acciones, “no contribuye a apaciguar las tensiones, sino todo lo contrario”.
“La sola amenaza de detención tiene un efecto paralizante para quienes realizan actividades legítimas y esenciales”.
