El Observatorio Venezolano de Prisiones señala que los reos están obligados a pagar entre 20 y 25 dólares a la semana, sino quedan marginados de todo derecho
Más de 400 presos de la cárcel de Vista Hermosa, en el estado Bolívar, reciben malos tratos y son privados de varios derechos por no pagar extorsiones a los pranes o líderes negativos del penal, según denunció este miércoles la ONG Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP).
La organización detalló en una nota de prensa que en el internado judicial permanecen unos 1.790 privados de libertad, de los cuales “al menos unos 400 hombres son rechazados por el pran, quien tiene el control”.
Los presos, prosigue el escrito, están obligados a pagar 20 dólares a la semana, y quienes no cumplan con esa cuota son expulsados y obligados a dormir a la intemperie y sin “derecho a recorrer las instalaciones, ni recibir visitas” o los alimentos que les llevan sus familias.
“Vista Hermosa tampoco escapa de las enfermedades que azotan a las cárceles venezolanas. Se pudo conocer que existen al menos 34 reclusos con tuberculosis y tres con VIH, quienes no reciben atención médica con regularidad y mucho menos el tratamiento adecuado”, afirma la ONG.
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El pasado mes de diciembre, el OVP aseguró que los líderes de las cárceles, conocidos como “pranes”, manejan “alrededor de cuatro millones de dólares al año”, que obtienen a través de actividades ilícitas.
Explicó que, según sus registros, estos impuestos tienen de media un valor semanal de entre 25 y 50 dólares en las cárceles del país, y que son los familiares de los detenidos quienes deben costear el pago para garantizar el bienestar de los privados de libertad.
“Las cárceles son mercados de la miseria humana, donde se ha puesto bajo tarifa todo: la vida, la integridad, el alimento, el sexo y la esperanza de un futuro mejor”, recuerda Humberto Prado, director del OVP.
Agregó que el poder de los pranes “trasciende las paredes de las cárceles” y los convierte en jefes de estructuras criminales que extorsionan y asesinan para atacar a la ciudadanía en general.
Es comentario a voces que el pran el “Niño Guerrero”, desde el penal de Tocorón, maneja los hilos de la organización transnacional del crimen Tren de Aragua, que tiene “sucursales” en Colombia, Perú y Chile, entre otros países de América del Sur.
