La música sobrepasa fronteras, es el caso de Rubén Palacios, un maraquero venezolano que trabaja en el sistema de transporte de Bogotá, llevando las raíces de su tierra natal
Este joven músico venezolano supera las dificultades de la vida y lucha incansablemente por alcanzar sus sueños.
La música llanera la lleva en las venas, las raíces de la tierra natal jamás se olvidan, por eso Rubén comparte su melodía en donde se pare.
Salió de Venezuela hace tres años, dejó allí a su hijo, su familia y amigos.
En esta historia de Heidy Galindo para Impacto TDN conocerás el diario vivir de Rubén en Bogotá, lo que extraña, sus momentos más difíciles como migrante, por qué se aventuró y cruzó la frontera.
Lo cierto es que su música lo acompaña y es su mejor aliada a la hora de subirse a un bus de servicio público en Bogotá.
Esto es: Un maraquero venezolano en TransMilenio.