Por presión externa no se va a llegar a una solución y en especial para plantearles dilemas estratégicos a la administración de Nicolás Maduro. John Magdaleno cree que a eso hay que agregarle un poderoso movimiento social y político que la oposición no ha hecho. En Cara a Cara con Esteninf Olivares, el politólogo nos presenta un panorama de los aciertos y desaciertos de un país con un régimen autocrático
El politólogo John Magdaleno considera que un proceso de cambio político o transición en Venezuela se hace cada vez más esquivo porque es obvio que desde la administración de Nicolás Maduro no hay intención de restituir garantías democráticas.
En una entrevista exclusiva con el programa Cara a Cara de Impacto Venezuela, Magdaleno considera que para llegar a esa transición democrática, tiene que existir varios elementos.
“Múltiples presiones, amenazas y múltiples incentivos que estimulen una ruptura de los compromisos de algunos factores de poder con el régimen autoritario”.
“Esto se construye con una importante política de cabildeo frente a la comunidad internacional y también con un poderoso movimiento social y político”, añadió.
Estamos en una dictadura
Para explicar la complicada situación del país, Magdaleno precisa que los venezolanos reconocen que estamos en un “régimen no democrático, autoritario, hegemónico, dictatorial”.
Pero lo que no se asimila de este “régimen dictatorial” son las implicaciones de esta situación.
“Si eso es así, no puedes esperar un CNE equilibrado; elecciones libres y competitivas; si eso fuese así, las cosas transcurrirían de la forma como sucede en un régimen democrático”.
Asegura que los venezolanos estamos en un “estado de antinomia (contradicciones)” porque esta generación “no tenía la experiencia de un régimen autoritario”.
“Los que lo tenían eran nuestros padres, nuestros abuelos que si vivieron en carne propia los restos de la dictadura de (Marcos) Pérez Jiménez”.
Aclara que el 70% de los regímenes autoritarios del mundo “ya no proceden de golpes de Estado, de formas de poder violentas como en el siglo XX, ocurre en pleno siglo XXI con líderes que llegan por la vía democrática y transgreden, se autocratizan”.
Deficiencias en la oposición
Ante estas explicaciones, Magdaleno es enfático al precisar que hay deficiencias en el diseño estratégico de la oposición y una de ellas “es haber desplazado la disputa al terreno externo, a la presión internacional”.
“Lo que debió haber hecho es, sí mantener la presión externa pero también tener y hasta mejorar la organización para la presión doméstica”, destacó.
Criticó que la oposición en la actualidad “no tenga un plan estratégico consensuado, unido”.
“Lo que más cerca hemos tenido a eso es el 11 de abril de 2002. La torta vino el 12 de abril, no el 11 que fue una movilización popular masiva con el poder para plantearle dilemas estratégicos al régimen político”.
