Sin medidas que complementen la reconversión monetaria, la hiperinflación seguirá afectando a Venezuela
El exdiputado y economista José Guerra aseguró que la nueva reconversión monetaria se puede perder “en meses”. Esto, si no se pone en marcha un programa contra la hiperinflación. En esta oportunidad se eliminarán seis ceros al bolívar y entrará en vigor el próximo 1 de octubre,
“Si esa actualización del cono monetario no va relacionada con un programa económico para acabar con la hiperinflación y hacer crecer la economía, esa reconversión monetaria se va a perder en meses, tal vez en un año”. Así lo explicó Guerra en un vídeo difundido por redes sociales.
A su juicio, eso puede suceder “porque las causas de la hiperinflación siguen estando ahí. El cono monetario va a perder, otra vez, sus atributos para facilitar y hacer factible la transacción”, aseveró.
El próximo 1 de octubre, al entrar en circulación la moneda reconvertida por tercera vez en lo que va de siglo, el bolívar soberano pasará a llamarse bolívar digital.
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14 ceros en 20 años
Los seis ceros que se le quitarán a la moneda se suman a otros ocho, ya eliminados en las dos reconversiones anteriores. En el 2008 la moneda pasó de llamarse bolívar -sin apellidos- a bolívar fuerte y, posteriormente, en el 2018, soberano.
Pese al nombre de la nueva moneda, esta no será digital, sino que contará con billetes y monedas. Según el BCV, los billetes y las monedas ya están en las entidades financieras.
Debido a la hiperinflación y la devaluación constante, el billete de más alta denominación actualmente en circulación, el de un millón de bolívares soberanos, se cambia por unos 25 centavos de dólar. Su capacidad de compra es prácticamente inexistente.
Ante esa situación, la economía venezolana vive una dolarización transaccional. Los negocios cuentan con numerosos problemas para cuadrar sus balances debido al gran número de ceros que deben escribir.
Frente a esta realidad, Guerra dijo que la nueva reconversión monetaria “tiene un solo propósito”, el de “facilitar el intercambio, la adquisición de bienes y servicios”.
“Es solo un cambio cosmético para facilitar las transacciones”, aseveró.
