El diálogo entre la oposición venezolana y la administración de Maduro sigue en la palestra internacional. Sobre todo en la región donde hay varios países interesados en resolver la crisis cuanto antes
A juicio del presidente de Colombia, Iván Duque el cerco diplomático que fue construido frente a la gestión de Nicolás Maduro “no tiene precedentes en América Latina”. Al punto que fue gracias a esas presiones que Maduro se sentó en la mesa de diálogo.
Duque, declaró en una entrevista con el diario O Globo, reproducida por la agencia EFE.
El mandatario neogranadino asegura que su país trabaja “unido” con Brasil por la libertad y el progreso de América Latina y, en especial, por la “vuelta de la democracia” a Venezuela.
“Somos países defensores de la democracia, de la economía de mercado con sentido social, de las libertades de los ciudadanos”, destacó.
Cabe resaltar que Duque el próximo 19 de octubre será recibido en Brasilia por su homólogo, Jair Bolsonaro.
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Brasil y Colombia unidos
Duque subrayó que Brasil y Colombia contribuyeron a la fundación del Foro para el Progreso y el Desarrollo de Suramérica (Prosul) y otros organismos interamericanos.
También resaltó que ambas naciones están “unidos en la defensa de la vuelta de la democracia a Venezuela”.
Según el presidente colombiano, el “cerco diplomático que fue construido (frente a la gestión de Nicolás Maduro) no tiene precedentes en América Latina”. Sostuvo que “la presión diplomática de quienes no reconocen al dictador lo obligó a sentarse en una mesa para negociar con la resistencia democrática”.
Aludió así al proceso de negociaciones que se lleva a cabo en México, el cual consideró un “espacio válido”.
No obstante, confesó que es “escéptico en relación a la verdadera voluntad de la dictadura”, que en su opinión intentará “enrollar” el diálogo “como ya hizo otras veces”.
Estrechar relaciones
Sobre su próximo encuentro con Bolsonaro, destacó las relaciones comerciales, económicas y políticas bilaterales. Indicó que las mismas deben hacerse aún más estrechas también en los ámbitos de la salud y la protección del medioambiente, dada la condición amazónica de ambos países.
El presidente colombiano evitó profundizar en las críticas que han recibido en la comunidad internacional las agresivas políticas de Bolsonaro para el desarrollo de la Amazonía.
