El analista Aníbal Sánchez lamenta que la coalición opositora no tenga un Plan B para saber qué hacer si, de realizarse las primarias, el ganador no puede participar en las presidenciales
“Los candidatos de la plataforma opositora de cara al 22 de octubre siguen dando demostración de estar divididos en su visión y misión, incluso, el tema de que se escogerá un líder y no solo un candidato, acrecienta las grietas entre ellos”.
La afirmación la hizo el analista político y diputado de la Asamblea Nacional (AN), Aníbal Sánchez, al hacer un balance de los últimos acontecimiento alrededor de las primarias, sobre todo con lo que representa las inhabilitaciones.
“Existe la posibilidad que el ganador de las internas sea uno de los políticos inhabilitados para ejercer cargos públicos por dictamen de la Contraloría o incluso que sea sancionado posterior a la consulta”, explicó.
Sánchez cree que esto “ha llevado a que líderes fijen o adelanten posturas, como Carlos Prosperi (Acción Democrática), quien, de ser inhabilitado, renunciaría o como expuso Delsa Solórzano (Encuentro Ciudadano), quien señala que se debería crear el mecanismo de sucesión”.
Con el término “línea sucesoral”, Sánchez se refiere a una especie de “Plan B” que la oposición debería tener, en caso, precisamente, de que el ganador de las primarias esté inhabilitado y no lo dejen participar en las presidenciales, de manera que la coalición pueda escoger al candidato, mediante otro mecanismo.
“Una línea sucesoral para definir la candidatura presidencial no sería sólo ante hechos sobrevenidos, pues la amenaza real existe”, dijo el analista.
Destacó que, por ejemplo, no hay “una propuesta al respecto ni tiene forma ni se contempla en el reglamento de las primarias, lo cual una vez más muestra su debilidad y falta de predicción”.
Por otra parte, lamentó que la CNP “aún no dice cuántos centros de votación se usarán para la consulta”, lo cual es negativo, a unas cuantas semanas de las primarias.
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Las posiciones
El analista recuerda que “María Corina quien lidera los estudios de opinión, pero ella rechaza la idea de la sucesión, porque lo que busca es liderar una política distinta incluso con apoyo de factores externos, lo que de entrada significa que se desplazan los líderes naturales de la misma plataforma”, expresó.
Esta posición de Machado, “sería secundada por Velásquez y Pérez Vivas, pues en su visión cerrada ven como inaceptable que la oposición claudique y que permita a Maduro decidir quién será el candidato”.
Superlano augura que el 22 de octubre se escogerá un líder que deberá «tomar decisiones en momentos más difíciles, que se avecinan, y que es necesario que esa persona no se doblegue».
Mientras que “a Henrique Capriles le ha correspondido asumir el puesto político que marca la diferencia. Se centra en que el gobierno es derrotable por vía de los votos, y antes de buscar otras rutas esta se debe trabajar y así como reconoce las amenazas, realiza propuestas en sentido de ampliar esa base electoral, más allá de la consulta de octubre”.
