La nueva era tecnológica ha traído soluciones, pero también problemas. Uno de ellos es la infidelidad virtual o los llamados “cachos”
Las personas se preguntan si realmente el coqueteo virtual es parte de una infidelidad, y queridos lectores lamento informarles que si lo es.
Cuando escribimos o hacemos un acto virtual con otra persona estamos invirtiendo tiempo, energía y pensamiento, así lo explica la sexóloga Jenny Marqués.
La mayoría de quienes entran en este juego es por experimentar la adrenalina de lo prohibido. Otros quieren poner a prueba su capacidad de seducción y sentirse halagados. Algunos intentan, simplemente, salir un poco de la rutina habitual.
Son muchas las personas que establecen una relación de pareja virtual, aunque tengan un compromiso en su vida real. En este caso, no hay contacto físico como tal y, por eso, es difícil catalogar esa infidelidad online.
¿Vale como infidelidad real o debería verse como una fantasía más?
Hay algo que es muy claro, las redes sociales facilitan la infidelidad. El portal británico Divorce-Online dio a conocer unas estadísticas de sus clientes, según las cuales, el 80% de las infidelidades comienzan en Internet, según el portal La mente es maravillosa.
Características de una infidelidad virtual
Veamos las características y las consecuencias de la infidelidad virtual:
En este tipo de aventuras, cuando son descubiertas, la justificación justamente es que es un juego ficticio que no es real, ni ha habido conexión, ni contacto físico, ni lo habrá.
La pantalla cada vez más se convierte en una parte muy importante de nuestro día a día y nos conecta mucho más de lo que podríamos imaginar y es así como se establecen conexiones muy fuertes en el plano vincular y hasta sentir una conexión especial o vivir diferentes experiencias en el terreno sexual.
Los sentimientos son los mismos que en la infidelidad física. Hay también estudios que corroboran que los romances virtuales pueden llegar a generar el mismo tipo de pensamientos y emociones que se generan en cualquier relación que se establece y esto ocurre porque en las relaciones virtuales se incluyen también el establecimiento del secreto y la fantasía.
Consecuencias de una infidelidad virtual
Traición: el que es engañado y descubre este tipo de infidelidades, ya sea con una infidelidad amorosa o sexual a través del mundo cibernético, se siente fuertemente traicionado y dañado por su pareja.
Ruptura de la confianza: se quiebra la confianza y se genera una fractura en la relación que muchas veces termina en separaciones.
Idealización: la persona que es infiel a través de las redes puede idealizar a la persona con quien tiene una nueva conexión, puede experimentar que su realidad es más monótona y aburrida que su nueva conexión virtual y, a veces, lo que comienza como un juego aparentemente inofensivo termina por romper la relación de ambas partes.
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“Entre cielo y redes no hay nada oculto”
El coqueteo sin duda es una de las chispas que mantiene el juego en una relación, y si le escribes a una persona virtualmente para distraerte ten en cuenta que es una infidelidad más y como dicen los venezolanos, “te pueden conseguir con las manos en la masa”, cuídate y ten prudencia.
