Un nuevo tiroteo ocurre a solo una semana de la masacre de Texas; para llenar de terror una vez más a Estados Unidos
Al menos cuatro personas murieron en un tiroteo en el campus de un hospital este miércoles en Tulsa, Oklahoma, dijo la policía.
El atacante también está muerto, aseguraron las autoridades en una publicación de Facebook.
La policía, respondió a una llamada que alertaba sobre un hombre que estaba armado con un rifle en el Natalie Medical Building; un edificio de consultorios médicos en el Hospital St. Francis, según una publicación anterior en Facebook del Departamento de Policía de Tulsa.
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“En este punto, podemos confirmar que el atacante está muerto”, dijeron las autoridades. Aunque no está claro si su muerte fue autoinfligida.
“Actualmente, los agentes están revisando todas las habitaciones del edificio en busca de amenazas adicionales”, agregó la publicación.
La policía estaba revisando “múltiples pisos” limpiando el edificio y evacuando a las víctimas el miércoles por la noche, dijo el sargento Richard Meulenberg.
“Hay cientos de habitaciones y cientos de personas dentro del edificio”, señaló.
Meulenberg, destacó que se encuentran, “tratando esto como una escena catastrófica en este momento”.
Se ha establecido un sitio de reunificación para familiares y amigos en Memorial High School al oeste de LaFortune Park, agregó la policía.
La Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés) está ayudando en la escena del tiroteo, dijo en Twitter la División de Campo de la ATF Dallas.
