La muerte de Diego Armando Maradona ha dado para todo. Unas fotos de los empleados de la funeraria que preparó el cuerpo del astro del fútbol y que se hicieron virales, mantiene en zozobra a los trabajadores y a sus familias que han recibido amenazas de muerte
Uno de los empleados de la Funeraria Pinier que aparece en una foto junto al cuerpo de Diego Armando Maradona y fue botado de su trabajo, habló.
Claudio Fernández confesó al medio deportivo Olé de Argentina, que desde que la foto se hizo viral ha recibido amenazas. “Me quieren matar”.
“He recibido amenazas telefónicas de un grupo de Argentinos Juniors. Me dicen que me van a matar, que me van a romper la camioneta, amenazan a mis hijos”, reveló Fernández.
Son dos fotos que circularon en las redes sociales e inmediatamente se hicieron virales, en una aparece Fernández junto a su hijo Caludio Ismael y en la otra Diego Molina.
Una vez salieron las fotos, Fernández fue despedido de su trabajo “por algo que no hice”.
Asegura que estaba acomodando el cadáver (de Maradona) y “me dijeron ‘flaco’ y justo levanté la vista y mi hijo levantó el pulgar. Nada más. Fue algo instantáneo”.
“Yo con (Sepelios) Pinier y con varias cocherías (funerarias) trabajo hace varios años. Soy de las personas que no piensan en sacar fotos de féretros o fallecidos por respeto. ¿Qué te puedo decir?”, expresó.
Fernández pidió perdón por lo sucedido y dijo tener mucho respeto por Maradona y su familia.
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“Yo le hice el servicio al papá de Maradona, al cuñado, y jamás lo hice. Estuve con Maradona cerca en vida. Y no lo hice en vida, sabiendo que es mi ídolo, no lo voy a hacer de fallecido. No hay intención”, expresó.
Dijo estar claro que “que mucha gente se ha ofendido, sé que lo han tomado mal. Me están llamando de todos lados. Sé que molestó. Pero nunca antes pasó”.
Claudio Fernández reveló que la foto no fue sacada de su teléfono, “eso es lo peor de todo”, pero que jamás pensó que la subirían a un grupo y se viralizara. “Le pido disculpas a la familia Maradona”, agregó.
Aseguró que lo único que deseaba era dejar a Maradona “como un ídolo” y que sus familiares “se despidieran, como hicimos con toda su familia”.
El hombre dejó claro que “lo que hice no fue intencional, ni de mi parte ni de mi hijo. De la empresa me echaron. Y la empresa no tiene la culpa, tampoco. Si ves la foto, soy el de anteojos; levanté justo la cabeza”.
