Las víctimas pasaron las fiestas de Año Nuevo tomando lo que aparentemente era una bebida artesanal
Unas siete personas perdieron la vida en la población de Chivacoa, en el estado Yaracuy, después de que aparentemente ingirieran una bebida artesanal, que paradójicamente es llamada “Muerte Lenta”.
Además de las siete víctimas, habría actualmente una octava persona bajo cuidados intensivos en el hospital Central de San Felipe, nosocomio al cual fueron trasladados todos los afectados.
Las víctimas mortales fueron identificadas como: Carlos Alberto Barico Torres (50), Oswaldo Raidi Oviedo Díaz (55), Francisco Finis Goncalves Manrique (48), Marco Antonio Parada Sánchez (60), Labor Pinto (67), Gustavo Antonio Donaire Fernández (58) y Víctor Alfredo Alvarado Peña de 67 años de edad.
Se pudo conocer que los afectados habrían ingerido desde el #30Dic una bebida artesanal identificada como “Muerte Lenta”. Su ingesta se prolongó hasta el Fin de Año.
Los afectados comenzaron desde el mismo 30 de diciembre dolores estomacales y de cabeza, sin embargo, continuaron bebiendo el mismo licor hasta el primero de enero.
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Este miércoles #4Ene, volvieron los malestares estomacales, dolores de cabeza y apareció una insuficiencia respiratoria, por lo que fueron trasladados por los familiares hasta el hospital de Chivacoa.
Debido a las complicaciones de salud, todos los afectados fueron referidos de inmediato al hospital central de San Felipe, en la capital yaracuyana, donde horas después de su ingreso, las siete víctimas fallecieron.
La investigación de “Muerte Lenta”
Al conocer la situación, el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) ordena una averiguación al respecto.
Los detectives del CICPC se trasladaron hasta el hogar donde las víctimas ingirieron la bebida artesanal, ubicado en el sector Pueblo Nuevo de Chivacoa.
Además de entrevistarse con los familiares de las víctimas, la policía pudo ubicar algunas botellas transparentes, las cuales supuestamente contenían la bebida que ingirieron las personas fallecidas durante las fiestas de Fin de Año.
Se pudo conocer que las botellas, además de la ropa de los afectados y otros objetos de interés criminalístico, han sido sometidos a pruebas forenses.
