Una red de secuestradores que opera desde Venezuela y Colombia hizo de las suyas en Argentina y hasta cobraron en bitcoins. Se llevaron al hijo del dueño de unos supermercados
Por primera vez, según fuentes judiciales, en la historia de Argentina, se llevó a cabo un secuestro donde los captores exigieron el pago del rescate en bitcoins
Pero las particularidades del hecho continuaron: parte de las negociaciones las llevaron adelante delincuentes que llamaban desde Colombia y Venezuela. La información la publicó el diario La Nación.
Se trata del plagio de un joven, hijo del dueño de unos supermercados en Quilmes.
“El secuestro extorsivo se extendió por cinco días y terminó ayer (lunes 19) cuando la víctima fue liberada”. Esto ocurrió “después de que su familia pagara el rescate exigido. Se trató de una suma importante”, sostuvieron los informantes consultados.
Por el hecho identificaron a un sospechoso. Se cree que la “mano de obra” para la ejecución física del secuestro era venezolana.
Buscan a varios autores del secuestro
“Se logró identificar a uno de los autores, cuya detención se ordenó, aunque sigue prófugo. Se dispusieron diversos allanamientos y se halló el lugar de cautiverio de la víctima”, informaron fuentes judiciales.
La investigación está a cargo de la fiscal federal de Quilmes, Silvia Cavallo. Ella cuenta con la colaboración de la Unidad Fiscal de Asistencia en Secuestros Extorsivos y Trata de Personas (Ufase). También de la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci). Interviene el juez federal Luis Armella.
“Se trató de un secuestro extorsivo muy complicado para investigar. Tuvimos que pedir la colaboración de la Fiscalía Nacional de Colombia. Se descubrió que las llamadas extorsivas se hacían desde ese país. Los delincuentes exigieron exigiendo una cifra exorbitante en bitcoins. La familia hizo una serie de pagos de manera electrónica”, dijeron las fuentes.
El hecho comenzó el martes de la semana pasada. A la víctima la secuestraron en la ciudad de Buenos Aires. Estuvo cinco días en manos de sus captores, mientras la familia negociaba su rescate.
“Los captores efectuaron llamadas extorsivas desde Colombia y desde Venezuela. Solicitaban dinero por su liberación. Luego de los pagos por el rescate, hechos por medios electrónicos, liberaron a la víctima”, explicaron a calificadas fuentes judiciales.
Apenas se denunció el secuestro, comenzaron a investigarlo detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes. También se sumó personal de la Policía Federal Argentina. Sobre todo, hay especialistas en ciberdelincuencia y secuestros extorsivos.
