Sobre la muerte de una venezolana que viajaba de Lima a Tumbes hay varias versiones; inicialmente se manejó que se descompensó, también se dijo que fue un paro respiratorio. Sin embargo, hay contradicciones sobre cómo ocurrieron los hechos
Las condiciones en las cuales la venezolana Luz del Valle Sánchez Silva, de 47 años, falleció el pasado miércoles no están del todo claras. Lo último que se maneja es que falleció como consecuencia de un supuesto paro cardíaco, en Sullana, cuando viajaba, a Tumbes desde Lima con la empresa Transportes Flores.
En las redes sociales se viralizó un video en el que agentes de la PNP suben a la venezolana a una camioneta para trasladarla al hospital, pero al llegar los médicos indicaron que esta ya había fallecido.
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Era una mujer sana
De acuerdo con Luisana, hija de Luz, su madre no sufría ninguna enfermedad. La joven advierte que la causa del fallecimiento le parecía muy extraña, ya que su madre no sufría del corazón.
La joven detalló que ante el viaje su mamá le dijo que “estaba bien y tranquila”, cita el medio VeneNewsperu.
Otro dato que aportó Luisana es que le indicaron que su madre había resultado positivo a la prueba de antígeno por COVID, por lo cual no podrían hacerle la autopsia.
“Mi madre no murió por COVID y siento que ocultan algo y no le quieren hacer la autopsia”, denunció. Es por ello que tras dar positivo la PNP suspendió la investigación.
Los médicos se contradicen
La hija de la fallecida relató que al llegar a Sullana escuchó la versión de la empresa, la cual indicaba que su madre Luz “había fallecido antes de llegar a Sullana”.
“Según ellos, la persona que estaba sentada a su lado fue la que se dio cuenta”, indicó al tiempo que agregó que “los trabajadores de la empresa dicen que la llamaron para que bajara, pero mi madre no se quedaba en Sullana, ella iba a Tumbes, no tenía que bajarse”.
Mientras que algunos testigos indicaron que la señora Luz habría sufrido el ataque en el terminal de Sullana.
No terminan de entregar el cuerpo
“Una vez en Sullana hicimos presión para que le realizaran una prueba molecular y nos dijeron que los resultados iban a tardar de 2 a 3 días, pero lo extraño es que a las horas nos llamaron, para indicarnos que había salido positivo”, contó.
La joven indicó que “muy aparte de eso no nos quisieron entregar el cuerpo, ponían muchos peros” y agregó que fue la funeraria la que los ayudó con el trámite, pero a pesar de eso, los hicieron esperar un día más.
Por otra parte, Luisana denunció que el hospital siempre se negó a entregarles el cuerpo y cuando lo hicieron ya este estaba en un estado de descomposición avanzado.
