Las iglesias tienen el sahumerio para bendecir y concentrar a la feligresía en sus oraciones. En las casas el olor aleja lo malo y atrae lo positivo. La filosofía del Feng Shui lo considera un purificador de energía. Su aroma nos avisa que es Semana Santa, tiempo de reflexión y de acercarnos a Dios
La Semana Santa tiene olor a sahumerio o incienso. Así es tradicionalmente en Venezuela que las casas y las iglesias se impregnen de ese aroma particular.
La palabra sahumar, significa “perfumar con humo aromático”, de ahí el nombre de los sahumerios.
Estos están hechos de diversas plantas aromáticas como romero, lavanda, menta, jazmín, albahaca, o hasta canela, vainilla y resinas como palo santo.
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Los sahumerios se encargan de purificar el ambiente a profundidad con el aroma que desprende el humo de las hierbas con las que está hecho.
¿Por qué prender sahumerios en Semana Santa?
Dicen los expertos que la esencia del incienso transforma lo negativo en positivo. Además, ahuyenta los malos espíritus.
Es un ritual que se lleva a cabo a las 12:00 del mediodía y a las 6:00 de la tarde del Jueves Santo y el Viernes Santo. Se cree que gracias al incienso o sahumerio se purifican y limpian las casas.
El humo se logra prendiendo un carbón, al que le ponen madera, plantas y flores que pueden ser de benjui, mirra, vainilla, clavo, canela. Hay multitud de ingredientes que se pueden emplear para darle matices y personalidad al incienso.
En las iglesias el humo del sahumerio tiene como fin purificar, sacar y alejar las malas energías, y bendecir los espacios por donde se echa.
Además de que, mientras este se quema, las oraciones de los religiosos se elevan con el humo que este bota, según los creyentes.
De dónde proviene la creencia católica
La Biblia hace referencia del sahumerio en dos episodios de la historia: la llegada de los Reyes Magos a Belén para venerar al niño Jesús. Uno de los presentes es el incienso.
También es protagonista el incienso en la anunciación del nacimiento de Juan El Bautista. Zacarías, su padre, era sacerdote. Y, por tanto, debía realizar la quema del incienso (costumbre litúrgica) en ciertas ocasiones.
Una vez, se le apareció el ángel anunciador a la derecha del altar del incienso. Fue entonces cuando supo que el matrimonio que formaba junto a Isabel, a pesar de que ambos contaban con una edad bastante avanzada, vería cumplido su gran anhelo: tener un hijo.
Los cofrades y los pasos, las procesiones de Semana Santa en España, Italia y otros países de Europa, tienen como elemento indispensable: el incienso. El aroma que este desprende embriaga a todos los asistentes a los actos de esos días, reseñó Ecclesia.
La iglesia católica también utiliza el incienso. Lo emplean en la procesión de entrada previa a la misa, al comienzo de esta, en la proclamación del Evangelio, en el ofertorio y en la consagración.
Sahumerio de las energías, según el Feng Shui
Los sahumerios se han empleado desde la antigüedad para realizar rituales de limpieza y protección contra las malas energías.
La filosofía del Feng Shui considera el sahumerio como el humo para limpiar y purificar la energía de los espacios, además que hacerlo llega a influenciar en el estado de ánimo y hasta la productividad de los que lo habitan.
También tienen un propósito espiritual, pues son usados para procesos de sanación o meditación, creando armonía en el ambiente.
Cómo hacer tu propio sahumerio
¿Qué necesitas?
Carbón
Plantas y hierbas secas como: romero, salvia, lavanda o albahaca (a tu gusto).
Canela o vainilla.
Palo santo.
¿Cómo hacerlo?
Prende el carbón con cuidado, lo colocas en una concha de coco o en una lata de metal que vayas a desechar. Le colocas las hierbas de tu preferencia, la canela, vainilla y el palo santo.
Cuando empiece el humo, pásalo por los rincones que quieras limpiar y finalmente déjalo sobre un plato de manera segura para evitar accidentes.
