Al solo aumentar los bonos que no todos los venezolanos reciben, Maduro aplica, de paso, una medida discriminatoria
La molestia de los venezolanos por el “no aumento” salarial de Nicolás Maduro, no es la única consecuencia de esta medida que solo incrementa los bonos que no inciden en las prestaciones sociales.
Lo más grave del anuncio es que, de un plumazo, esta administración ha eliminado décadas de luchas laborales y de reivindicaciones de los trabajadores.
El economista y profesor de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Leonardo Vera, resalta qué hizo Maduro al aplicar una fórmula para “el aumento” que resulta ser discriminatoria y afecta a millones de venezolanos.
“Al congelar el salario mínimo, como en efecto ha hecho Maduro, se han inventado una fórmula que minimiza el impacto en prestaciones sociales, pagos de utilidades y otros beneficios laborales vinculados al salario mínimo. Minimizan el impacto fiscal”, explicó el experto en su cuenta de Twitter.
Agrega que “la fórmula encontrada por Maduro y sus asesores para mejorar las remuneraciones de los trabajadores (públicos y privados) y de los jubilados y pensionados es la expresión de la grave crisis fiscal que atraviesa Venezuela”.
“Esta sería la fórmula gradual para acabar con la carga de las prestaciones y otros beneficios laborales sobre el presupuesto del Estado y sobre las finanzas de las empresas. El Estado alivia cargas, las empresas alivian carga, el eslabón más débil pierde sus beneficios”, enfatiza.
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De vieja data
Explica que la “crisis fiscal se remonta a varios años atrás cuando un sector público sobre-endeudado repagaba en capital e intereses a los acreedores internacionales montos equivalentes a 26% del presupuesto de gastos del Estado”.
Luego, la crisis fiscal “se agudizó con la hiperinflación, y su desplome continuo con la debacle de la economía y del sector petrolero que tumbaron a niveles mínimos la recaudación. La ausencia de controles sobre PDVSA y los robos de cargamentos petroleros ha sido una estocada mortal”, lamentó.
Lo que viene
Vera señala que, “en perspectiva en la medida que el bolívar se siga debilitando frente al dólar en el tiempo el salario mínimo que hoy está en 5,2 dólares desaparecerá y todas las remuneraciones para esos trabajadores no calificados (incluyendo sector público y privado) se expresaran en bonos”.
Regresiva y discriminatoria
Alerta que la “bonificación de las remuneraciones planteada por Maduro es regresiva y discriminatoria. Regresiva porque un trabajador que gana salario mínimo acumula las pocas prestaciones sobre un porcentaje de su ingreso que es menor al de los trabajadores que ganan más que salario mínimo”.
Enfatiza en que “es discriminatoria porque hay diferencias importantes en el monto de los bonos que se asignan a los beneficiarios. Por ejemplo, Jubilados de la Administración Pública recibirán un bono de 49 dólares en tanto que los pensionados del IVSS sólo de 20”.
Puso otro ejemplo del carácter discriminatorio de la medida: “los trabajadores de la administración pública y de la empresa privada recibirán bono de alimentación por 40 dólares, pero más de 5 millones de jubilados y pensionados no reciben ese beneficio”.
Además, señala que “muchos pensionados no cobran el llamado“bono de la guerra económica. Nadie sabe con qué criterios se otorga. Aquellos que lo cobran (privilegiados), recibieron en abril 15 dólares, ahora recibirán 5 más. Ese es toda su mejora. Sólo 5 dólares mensuales de mejora”.
