Tras ser depositados los restos mortales de Isabel II en la capilla del rey Jorge VI, padre de la monarca, días después serán trasladados los del príncipe consorte Felipe de Edimburgo para que queden juntos en Windsor
Tras viajar más de 500 kilómetros y recibir los respetos de más de 100 jefes de Estado de todo el mundo y de cientos de miles de personas que hicieron una fila que superó las 15 horas de espera, los restos mortales de la reina Isabel II llegan a su destino final, la capilla en memoria del rey Jorge VI, en el castillo de Windsor.
Allí reposan los restos del padre de Isabel II, el rey Jorge VI, así como su madre, Elizabeth Bowes – más conocida como la Reina Madre- y su hermana Margarita.
La última morada de la reina está ubicado al lado de la famosa capilla real de San Jorge, el lugar donde se concentra el mayor número de miembros de la realeza sepultados en Reino Unido, reseñó la BBC Mundo.
Los restos del príncipe consorte Felipe de Edimburgo, esposo de Isabel II por más de 73 años y fallecido en abril de 2021, serán trasladados también a ese lugar para que reposen junto a su esposa.
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Los restos mortales de Felipe están actualmente depositados en la bóveda real de la capilla San Jorge.
Según expertos de la realeza, l capilla en memoria de Jorge VI, que funciona como un anexo, se construyó en 1969 por orden de Isabel II.
La idea de la monarca era que allí descansaran no sólo los restos de sus padres, sino también los suyos y los del príncipe Felipe una vez fallecieran ambos.
El lugar tiene un grabado dorado con la imagen del padre de Isabel II y, en el piso, una placa oscura con letras doradas donde están los nombres de Jorge VI y la Reina Madre y los años de nacimiento y fallecimiento correspondientes.
La reina Isabel II no solo estará rodeada de su familia, sino también de toda la historia que contiene el lugar aledaño a su lugar de descanso: la capilla real de San Jorge.
El castillo preferido de Isabel II
El castillo de Windsor data del siglo XI y ha acogido importantísimas bodas reales, como la del príncipe Harry y Meghan Markle, pero también la de la princesa Margarita con su primer marido, el fotógrafo Anthony Armstrong-Jones.
Según la revista Vanity Fair, la reina Isabel utilizó esta fortaleza como refugio en tiempos difíciles y fue ahí donde pasó el confinamiento, además de disfrutar de retiros apacibles en él en los buenos momentos. Pero hubo una época en la que fue la vivienda de otros royals.
El castillo tiene más de 900 años de historia y empieza cuando el rey Guillermo I el Conquistador lo manda construir.
Desde entonces han vivido en él hasta 39 monarcas. Desde que comenzó su reinado, la reina Isabel II pasó en el castillo muchos de sus fines de semana privados.
Está situado en Windsor, perteneciente al condado de Berkshire, a una hora de Londres, lo que facilitó la movilidad de la monarca.
Su estructura medieval ocupa más de cinco hectáreas y combina los estilos georgiano y victoriano, con algunos toques góticos.
Fue edificado con tres murallas sobre una zona elevada del terreno para que sirviera como fortaleza resistente contra toda clase de enemigos.
