Lo paradojico es que Vincent Van Gogh era un ambientalista nato y de ahí su fascinación por los girasoles
Manifestantes ecologistas arrojaron sopa de tomate sobre el famoso cuadro Los Girasoles de Vicent van Gogh expuestos en la National Gallery de Londres.
Los militantes medioambientales dicen que hicieron esta acción de protesta para exigir al gobierno del Reino Unido que ponga fin a los proyectos de extracción de gas y petróleo.
Estos dos activistas del grupo de desobediencia civil “Just Stop Oil” arrojaron dos latas de sopa de la marca Heinz sobre el lienzo del maestro impresionista neerlandés, protegido por un cristal, y parte de su marco dorado, según muestran videos publicados en las redes sociales.
Tras lanzar la espesa sustancia, los dos activistas se arrodillaron frente a la obra y se pegaron con cola a la pared de la pinacoteca.
La seguridad del museo llegó poco después e hizo salir a los visitantes de la sala 43 donde se expone la obra de Vicent van Gogh.
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No es la primera vez que la emprenden contra Van Gogh
Los girasoles” es la segunda obra más famosa de Vicent van Gogh atacada por “Just Stop Oil”, dos de cuyos activistas se pegaron a finales de junio al cuadro Melocotoneros en flor, de 1889, expuesto en la Courtauld Gallery de Londres.
“¿Qué vale más, el arte o la vida?”, “¿se preocupan más por la protección de un cuadro o la protección de nuestro planeta y de las personas?”, lanzó uno de los manifestantes el viernes.
Esta última acción del grupo tiene lugar tras dos semanas de protestas por todas la capital británica.
“La crisis del coste de la vida proviene de los combustibles fósiles, la vida diaria se ha vuelto inasequible para millones de familias que pasan frío y hambre, no pueden permitirse ni siquiera una lata de sopa”, dijo Phoebe Plummer, una activista de 21 años citada en un comunicado del grupo.
“Al mismo tiempo”, “la gente está muriendo” a causa de “los incendios y las sequías provocadas por el cambio climático”, argumentó, y “no podemos permitirnos nuevos proyectos de petróleo y gas”.
Ambos fueron detenidos por daños criminales y allanamiento agravado, así afirmó la policía Scotland Yard.
Pintado en 1888 por Vicent van Gogh, el cuadro está valorado en 84,2 millones de dólares.