Los parientes revelaron que la menor que se suicidó se encontraba en un cuadro depresivo debido a la muerte de su progenitora y abuela
Una doble tragedia vive la familia de la pequeña Solange María García Silva de 11 años de edad, quien se suicidó por presentar un cuadro depresivo por la muerte de su madre y presuntamente porque su padre la violara.
La niña de 11 años de edad, pudo tener otro destino, pero la vida muy pronto le arrebató a su madre y a su abuela, situación que la tenía deprimida.
Sin embargo, lo peor ocurrió luego que su propio padre, presuntamente abusó sexualmente de ella y esto la llevó a tomar la determinación de poner fin a su existencia.
El hecho ocurrió el pasado miércoles 10 de marzo en una humilde vivienda ubicada en la avenida 13 con calle 24 del barrio Ma’ Vieja del municipio San Francisco del estado Zulia.
En esa casa la niña residía con su progenitor Javier Alexander García, de 45 años de edad, informó El Aragüeño.
A la menor la encontraron sus parientes suspendida.
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Para ello utilizó una cuerda de tela y la alcayata sirvió de soporte, para que la menor procediera a poner fin a sus días.
Sus familiares de inmediato la cargaron y llevaron hasta el centro de salud, donde certificaron que ingresó sin signos vitales.
Depresión
De inmediato funcionarios del CICPC iniciaron las investigaciones y en ese proceso, parientes de la occisa, revelaron que la menor se encontraba en un cuadro depresivo debido a la muerte de su progenitora y abuela.
Pero los detectives se enterarían pronto que algo más abrumador condujo a Solange al suicidio.
Luego que se le practicara el protocolo de autopsia, la misma reveló nuevos detalles.
Además de mostrar que la causa de la muerte fue asfixia mecánica por ahorcamiento, se determinó que la niña había sufrido abuso sexual recientemente.
Los investigadores del Cicpc no perdieron tiempo y enterarse de ese detalle, profundizaron los interrogatorios a los familiares de la pequeña.
Estos manifestaron que el padre de la niña, en varias ocasiones se encerraba con su hija en su habitación.
Seguidamente un grupo de funcionarios fue en busca del padre violador en el barrio Ma Vieja de San Francisco y lo detuvieron.
El sujeto al ser requisado se le encontró en su poder un teléfono celular, que al ser revisado se logró ubicar material de pornografía infantil.
A Javier Alexander García, no le quedó más que confesar ser enfermo sexual y haber abusado de su hija
