El dirigente sindical Iván Freites informó que Cardón no está produciendo gasolina por falta de nitrógeno
La estatal Petróleos de Venezuela SA (Pdvsa), reanudó la producción de gasolina en el reformador de nafta en la refinería Cardón, hace una semana, medida que alivia la escasez de combustible en el país.
Reuters informó que la red de refinación de 1.3 millones de barriles diarios está paralizada por años de desinversión y falta de mantenimiento.
“Sí, paró el reformador. Se disparó un compresor y según falta nitrógeno, sin embargo, hay alto inventario de carga para el reformador”, dijo un trabajador de la planta, en anonimato por temor a represalias.
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Por su parte, el líder sindical Iván Freites agregó que la unidad fue detenida el 27 de agosto por falta del insumo.
No hay nitrógeno
“No estamos produciendo gasolina, el reformador de NAFTA de Cardón se paraliza por falta de nitrógeno, la empresa surtidora de Nitrógeno dijo que no hay para PDVSA”, escribió Freites en Twitter.
El reformador, con capacidad de 45.000 bpd, es una unidad de procesamiento de nafta que produce componentes de alto octanaje utilizados en la preparación de mezclas.
Asimismo, dijo que Pdvsa la había puesto en funcionamiento con una producción de unos 25.000 bpd de gasolina para enviarlos directo al mercado interno.
Freites informó a Reuters que la unidad de Craqueo Catalítico Fluidizado (FCC, por su sigla en inglés), con capacidad de 88.000 bpd, de Cardón, está detenida.
Venezuela sin gasolina
Sin embargo, la planta, clave en la producción de gasolina a mayor escala, podría reiniciar en los próximos días, explicó el dirigente sindical.
Amuay y Cardón, que conforman el Centro de Refinación Paraguaná en Falcón, tienen capacidad de producción conjunta de 955.000 bpd.
En la refinería El Palito tiene una capacidad de 146.000 bpd, la unidad de craqueo catalítico, detenida por fallas.
Venezuela, en recesión económica, consume unos 180.000 bpd de gasolina en pandemia.
Con el deterioro del circuito refinador, el suministro se redujo a unos 30.000 bpd.
En mayo, un despacho de 1,53 millones de barriles de combustible iraní alivió temporalmente la sequía.
