Una dirigente del Magisterio denunció que con el aumento de los bonos la administración de Maduro recarga en los trabajadores el peso de la crisis que sus políticas económicas ha creado
“Con la bonificación del salario en Venezuela se convertirá el trabajo en indigencia”.
La advertencia la hizo Raquel Figueroa, dirigente sindical del Magisterio venezolano, quien denunció que Nicolás Maduro, con el aumento de los bonos de Guerra Económica y Alimentación, ocasionó “una pérdida de 87 % de todos los beneficios para los trabajadores, y un gran porcentaje de ello es el salario”.
Cabe recordar que Maduro, el 1 de mayo pasado, decretó un aumento del bono de Alimentación a 40 dólares y del bono de Guerra a 30 dólares; es decir, que los trabajadores de la Administración Pública perciben mensualmente 70 dólares, solo en bonos, más los 130 bolívares de salario que equivale a 5,16 dólares.
“Los bonos pasaron a constituir 93 % del ingreso mínimo de los trabajadores”, dijo la dirigente en entrevista con radio Fe y Alegría.
Este hecho que va contra las conquistas salariales de décadas de lucha, sumado a que el monto, no alcanza para cubrir los gastos de alimentación, ropa, calzado y servicios.
En el caso de los trabajadores del Magisterio, Figueroa recordó que “el artículo 104 de la Constitución nos otorga una condición especial, por la función que desempeñamos, que es la formación ciudadana. No obstante, a pesar de los aumentos estamos en 97 % de pobreza extrema”.
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Recordó que el Banco Mundial considera a las personas que disponen de un ingreso menor a 2,15 dólares diarios se encuentran en la pobreza extrema. “En Venezuela un trabajador gana al día 0,172 dólares”, lamentó.
Figueroa resaltó que con esta medida se recarga en el trabajador todo el peso de la crisis.
“Se busca abaratar el costo de la fuerza de trabajo para así maximizar ganancias y reducir el gasto público, de tal manera que el peso de la crisis que no la generan los trabajadores, sino que se produce por las malas políticas económicas del Gobierno nacional”, enfatizó.
