Desde Moscú acusan a Ucrania de tener un gobierno “Neonazi y drogadicto”. Horas antes reciben en el Kremlin al embajador de Israel y prometen contrarrestar el resurgimiento del nazismo
La diplomacia de Rusia lanzó este viernes #25Feb fuertes declaraciones. Después de calificar el gobierno del ucraniano Volodimir Zelenski como “neonazi y drogadicto”, enfila sus baterías hacia Finlandia y Suecia.
A través de las redes sociales se conoció que María Zarajova, ministra de relaciones exteriores de Rusia, habría “advertido” a ambas naciones nórdicas que el adherirse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), podría traer “graves repercusiones”.
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Zarajova habría manifestado que la Organización de Cooperación y Seguridad en Europa (OSCE), ente al que ambos países pertenecen, firmaron un acuerdo de seguridad. Este indica que la seguridad de los paises miembros no debe atentar contra la de otros. “Es evidente que la adhesión de Finlandia y Suecia a la OTAN, que es principalmente un bloque militar, tendría graves consecuencias militares y políticas que requerirían que nuestro país tome medidas recíprocas”, manifiesta Zarajova.
Rusia señala a Zelenski de neo-nazi
Horas antes, el propio Vladimir Putin habría calificado a la administración de Zelenski como un gobierno “neo-nazi y drogadicto” que utiliza a las masas para transportar armas pesadas y ser “carne de cañón”.
Vale acotar que antes de estas declaraciones, uno de los personeros de Putin se reunió con el embajador de Israel en Moscú. Tras la conversación, el Kremlin indica a la opinión pública que “escucharon la posición de Israel ante el conflicto”. Prometió continuar con la lucha contra el resurgimiento del neo-nazismo.
