CEV afirmó que la crisis económica y social, por la cual responsabilizó a la administración de Maduro obliga a los venezolanos operar con la delincuencia
La Conferencia Episcopal aseguró que los conflictos armados en Venezuela evidencian que el modelo chavista-madurista fracasó.
Aseguró que son un fracaso como garantes de seguridad en el país, debido al azote del país por parte de las bandas delincuenciales.
«Por un lado es el resultado de dos décadas en las que se ha blindado la violencia desde el poder como arma política, a diestra y siniestra, de palabra y obra, como amenaza y como hecho consumado», expresaron los obispos en un comunicado.
Lea también: MEGABANDAS A PLOMO: las Faes y Cicpc toman la Cota 905 y van “POR LAS CABEZAS” del “Koki”, “Vampi” y “Garbis”
Aseguraron que quienes están en el poder imponen su ideología “trasnochada” mediante la fuerza y la violencia.
“No hace falta esperar demasiado para observar una respuesta igualmente violenta”, dice el texto.
La CEV insistió que el apoderamiento de las bandas criminales significa el fracaso del “modelo social productivo”.
Por lo que aseguró que la administración de Nicolás Maduro es responsable que las personas busquen ganarse la vida, hasta de forma delictiva.
Asimismo, la Conferencia Episcopal criticó la actuación de los funcionarios de los organismos de seguridad.
Consideran que «dejaron de ser garantes de la seguridad, la convivencia pacífica y han abandonado regiones rurales y populares del país.
«El habitual respeto a la autoridad se ha transformado en desconfianza y temor a la autoridad, en vista de la distorsión de las irregulares funciones que hoy cumplen, incluyendo la extorsión y el soborno», añadieron.
Por su parte Maduro, dijo este viernes que los cuerpos de seguridad están actuando de forma «contundente» en la capital para garantizar la paz.
