Confesó que muchas veces quiso quitarse la vida, sufrió él y su familia
Alex Jhoan Borja cuenta que fue condenado por el homicidio de una mujer ocurrido en junio de 2018 en Cali.
Este joven inocente asegura que la única sospecha que tenía la justicia para dictar su pena era que tenía rasgos parecidos al sicario: de raza negra y delgado.
Antes de ser capturado había empezado a estudiar ingeniería industrial, carrera que tuvo que dejar por falta de recursos para trabajar en construcción con su papá; así dio a conocer Oscar Rosas en Caracol.
Así ganó la verdad
La defensa del joven inocente señala que la Fiscalía creó una hipótesis sustentada en una fotografía tomada por la Policía como única prueba del caso. Para desvirtuar estas acusaciones, la defensa presentó videos que mostraban a Alex Jhoan en otro sitio de Cali al momento del homicidio.
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Este joven inocente dice que tuvo episodios de depresión que lo tuvieron al borde del suicidio, pero las ganas de luchar por su inocencia lo mantuvieron en pie.
“Casi me cuesta la vida porque hubo momentos de depresión, de frustración en medio del dolor de mi familia, de mi madre. Era lo que me marcaba en la cárcel. No era solo yo el inocente, sino que era una familia completa”, comenta el joven inocente, que entró a los 23 años a la cárcel.
Hoy señala que, aunque es difícil, tratará de retomar sus estudios y recuperar el tiempo perdido.