Sadio Garavini y Milos Alcalay, especialistas en materia internacional, coinciden en que la intensión de Maduro con los misiles iraníes y de sus aliados, Irán y Rusia, es provocar un ambiente de desestabilización en América Latina
El anuncio de Nicolás Maduro acerca de que comprar misiles a Irán sería “una buena idea” no es una casualidad. Expertos en política internacional de la talla de Sadio Garavini y Milos Alcalay, sostienen que el régimen busca “molestar a los Estados Unidos. Esto, pese a las sanciones contra Venezuela y la nación persa.
“Venezuela corre el riesgo de que cualquier gobierno que asuma en enero en Estados Unidos aumente su presión”, por el caso de los misiles iraníes, dijo Garavini en entrevista con la Voz de América.
Garavini considera que en el posible pacto militar con Irán también tiene relación Rusia, otro de los principales aliados del régimen. “El gobierno de Vladimir Putin extendió sus intereses geopolíticos hasta países lejanos como Venezuela”, dijo.
Destacó que Rusia piensa en “Irán como el enemigo de mi enemigo”. Y también en ese pulso con Washington, Arabia Saudita e Israel, promueve enfrentamientos con Estados Unidos en América Latina.
“A Rusia le encanta molestar a Estados Unidos en el hemisferio. Lo mantiene ocupado, irritado y lo distrae”, sostiene el analista.
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Los misiles son una preocupación
Para el exembajador de Venezuela en las Naciones Unidas, Milos Alcalay, la posible negociación de misiles iraníes es una preocupación para la región.
“La alianza con Irán lleva a una profunda preocupación para el resto del hemisferio. Toda compra de armamento iraní violaría los tratados de Tlatelolco, que proscribe las armas nucleares en América Latina y el Caribe. Además del acuerdo Interamericano de Asistencia Recíproca, conocido como TIAR“.
Opina que el binomio de Irán y Venezuela sirve para “acosar” a Estados Unidos en plataformas multinacionales. Un ejemplo es el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, donde EE.UU. pidió que las sanciones contra Irán se incrementen.
Alcalay va más allá. Menciona el respaldo de Turquía a Venezuela, más las acciones del Foro de Sao Paulo y grupos guerrilleros. “El resultado es la desestabilización de la democracia en Latinoamérica”.
Maduro “debería comprar respiradores, debería invertir en mantener los hospitales”, fustigó el exembajador. Esto, en referencia a la crisis venezolana por la COVID-19.
