La tendencia sustentable llegó a los hogares para quedarse. El auge de los productos naturales para limpiar hogares y oficinas tiene alcance mundial, en este sentido, el bicarbonato y el vinagre están de regreso y con más fuerza
En una época en la que la limpieza y la desinfección de la casa adquirieron un rol central producto de la pandemia, ahora es importante hasta la composición del aire que respiramos puertas adentro y qué impacto tienen los productos químicos en el ambiente y la salud. La solución parece venir principalmente, de la mano del vinagre y el bicarbonato de sodio, productos de origen natural libres de químicos.
Estos dos productos podrían reemplazar con su poder de limpieza y desinfección los más de diez productos que usualmente se adquieren para higienizar todos los ambientes de la casa.
Los “remedios caseros” no son en realidad nada nuevo. Muchas familias atesoran estos consejos y los transmiten de generación en generación desde hace décadas.
Es de uso común el vinagre para limpiar vidrios o para mantener la ropa colorida, limón para blanquearla, bicarbonato para sacar manchas.
La diferencia es que ahora estos consejos se pusieron de moda: desde los timelines de las más aclamadas influencers, hasta nuevas marcas que se dedican exclusivamente a vender y difundir sus bondades.
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Hábitos sustentables
Enjuague para la ropa: poner vinagre concentrado en la misma cantidad y ubicación del lavarropas. Afloja los tejidos y de sensación de suavidad, además de que preserva los colores y al lavarropas.
Destapar cañerías: verter una taza de bicarbonato de sodio y dos de vinagre concentrado. Dejar actuar y agregar agua caliente.
Vidrios: pulverizar vinagre concentrado y limpiar con microfibra húmeda .
Pisos: Diluir media taza de vinagre concentrado en cuatro litros de agua. Agregar cinco gotas de aceite esencial, como lavanda.
Lavado a mano: sal gruesa en el último enjuague o un chorro de vinagre ayuda a preservar los colores.
Manchas en la ropa: fregar con una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio antes de poner a lavar.
Lavarropas: limpiar con detergente y bicarbonato, luego con una esponjita y un cepillo, y hacer un ciclo con un litro de vinagre concentrado.
Feos olores en la nevera: poner bicarbonato en un frasco de boca ancha luego de la limpieza.
Con información El Clarín
