Luis Vicente León y Félix Seijas sostienen que la oposición debe trabajar para que el triunfo en Barinas no sea puntual, sino una lección de lo que se debe hacer
El triunfo del candidato opositor, Sergio Garrido, en la repetición de las elecciones para gobernador en Barinas, se puede ver desde varios puntos de vista. Pero, según los analistas, el foco de este resultado debe estar en que el populismo, la abstención y la división, son derrotables ¿Cómo? Con organización.
Para el presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, “el triunfo opositor en Barinas es un símbolo para respaldar la participación electoral y la articulación de la oposición institucional alrededor de una campaña homogénea”. Esto, además de “la concentración del voto en las fuerzas reales de la oposición sin hacer el juego a los divisionistas”.
El analista sostiene que hubo “dos mensajes claves de la elección. 1. El voto recupera fuerza como instrumento de lucha política. Tanto que hasta los líderes que rechazaron la elección del 21N terminaron promoviendo el voto. 2. Los divisionistas quedaron como lo que son. Cada vez engatusan a menos pendejos”.
León destaca que los venezolanos “teníamos tiempo sin ver un evento electoral en el que los electores votaron y ganaron”. Además, “el candidato derrotado reconoce gallardamente el triunfo de su oponente, incluso antes de la declaración oficial”.
No obstante, el experto alerta que lo de Barinas “es una burbuja. Pero es como entrar a un bodegón y sentirte de viaje”.
A su juicio, “los resultados no cambian la difícil realidad política de Venezuela y estamos muy lejos de una solución estable. Pero, definitivamente, son una gran lección sobre la potencia del voto para presionar cambios, incluso cuando las condiciones electorales son desventajosas”.
Hace énfasis en que, este domingo, “en Barinas perdió el chavismo y el abstencionismo. No valió populismo, movilización oficial, desplazamiento militar, control institucional ni ataques virulentos contra quienes querían votar. El voto de más de la mitad de los barineses mató varios pájaros de un tiro”.
Dijo que la mayor ganancia para la oposición en este proceso es “haber tenido a todas las fuerzas políticas y líderes institucionales volcados en Barinas. El respaldo a su candidato permitió motivar el voto, canalizar la rabia y producir un triunfo con una simbología fundamental para la oposición”.
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Visión a largo plazo
Entre tanto, Félix Seijas, director de la firma Delphos, sostiene que el resultado en Barinas es fruto de un esfuerzo con visión a largo plazo.
Esto quiere decir que ese trabajo opositor no debería terminar con este proceso. Por ello, alerta que en este camino pueden surgir retrocesos o logros. Cita como ejemplo la escogencia de la directiva del CNE en el 2021.
“Para la oposición el trabajo es bastante claro: encontrar una nueva estructura organizativa que permita la participación de distintos movimientos políticos, y que, además, reconozca el valor de las organizaciones civiles y esté dispuesto a aceptarles como un actor independiente”, señaló a través de Twitter.
El experto cree que la decisión de participar o no en unas elecciones solamente tiene sentido su forma parte de una “estrategia amplia que genere en el bloque de poder la presión necesaria para producir una fractura”.
