Durante los años 90, Andrés García estuvo muy relacionado con el medio artístico venezolano
La reciente muerte del actor mexicano Andrés García desempolvó recuerdos de su paso por la industria artística venezolana.
En esa época, junto con Salvador Pineda, hacían una dupla que no solo se dedicaba a realizar exitosas producciones en México; sino también en otros países latinoamericanos.
Y, en dos oportunidades, el galán García estuvo relacionado de una manera importante con el ámbito artístico venezolano.
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El primero de esos proyectos fue con Ruddy Rodríguez, quien era considerada para el momento, la gran protagonista de Venezuela. Surgida de las filas del Miss Venezuela, y gracias a un hábil mánager, la venezolana logró posicionarse como de las más cotizadas en el país y fuera de él.
Junto a Andrés García y Salvador Pineda, Ruddy protagonizó, en 1990, El Magnate, una opulenta telenovela hecha entre Miami, España y Caracas. La misma dejó más que los capítulos grabados, por cuanto existe la leyenda urbana de que García quiso seducir a Rodríguez durante las grabaciones.
Y ella no solo no se dejó, sino que lo rechazó. Esto provocó una tensa y mala relación durante la telenovela que la puso en jaque. Asimismo, se aseguró en el momento (aunque ninguno de los involucrados lo habló públicamente nunca) que la relación llegó a volverse tan tirante que Andrés García y Ruddy Rodríguez presuntamente habrían llegado a los golpes en un momento.
Para el otro proyecto, esas leyendas urbanas no existieron. Se trató de la adaptación, en 1991, de La Mujer prohibida, una producción de los 70. Alberto Gómez se encargó de esta producción que protagonizaron Mayra Alejandra, Andrés García, Fernando Carrillo y Tatiana Capote.
Fue la primera coproducción entre Venevisión y la española Telecinco. En ese momento, la industria de la TV venezolana disfrutaba de las mieles del éxito, impulsado, principalmente, por Cristal.
