Durante el acto en la frontera entre México y Guatemala, un migrante venezolano describió la situación crítica que enfrentan en su búsqueda por llegar a un destino seguro
Activistas, migrantes y la iglesia católica se unieron este Domingo de Ramos para llevar a cabo la representación del ‘Viacrucis Migrante’ en la frontera sur de México, colindante con Guatemala.
Este evento simbólico tuvo lugar en un momento crítico donde cientos de migrantes se encuentran acampando en condiciones insalubres, enfrentando diversos peligros en su travesía hacia Estados Unidos, reseña la agencia Efe.
El director del Centro de Dignificación Humana (CDH), Luis Rey García Villagrán, encabezó la procesión cruzando el río Suchiate que separa a México de Guatemala, cargando una enorme cruz de madera.
Este acto simbólico del ‘Viacrucis del Migrante’ buscó llamar la atención sobre la necesidad de implementar políticas humanitarias más efectivas para la migración en México.
Durante el recorrido, García Villagrán expresó que esta representación simboliza la sangre, la muerte y el dolor que enfrentan las familias migrantes en su travesía por territorio mexicano en busca de una vida mejor en Estados Unidos.
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“El Viacrucis se nos hace presente el sufrimiento de la migración y queremos crear conciencia en el Gobierno para que cambie sus políticas migratorias para que sea más humana y también conciencia en la población que no podemos quedar pasivos viendo el sufrimiento de esta población”, acotó.
En un momento especialmente conmovedor, en el paso del ‘Coyote’, lugar emblemático para los migrantes irregulares, se detuvo para hacer una oración por las mujeres y niños migrantes provenientes de diversas naciones como Honduras, El Salvador, Guatemala, Haití, Venezuela y más.
Las palabras de Rafael Díaz, un migrante colombiano, reflejaron la dualidad de sentimientos entre la fe y la tristeza ante las dificultades del viaje.
En un testimonio conmovedor, expresó su deseo de poder participar en las misas de Semana Santa, pero comprendía la necesidad de seguir adelante en su camino hacia Estados Unidos.
Por otro lado, Jon Usete, un migrante venezolano, describió la situación crítica que enfrentan los venezolanos en su búsqueda por llegar a un destino seguro.
Resaltó los desafíos enfrentados debido a la corrupción y la explotación por parte de las autoridades, mientras pedía la ayuda divina para completar su viaje con éxito.
